Las constantes noticias e imágenes de aviones logrando salir de Kabul alivian el dolor de Nadia Ghulam que, desde miles de kilómetros de distancia, en España, vigila a algunos de sus familiares que esperan su turno para dejar Afganistán.
“Mi padre y mi madre no pudieron venir. Mi padre tiene una enfermedad psíquica. Y mi madre tiene varias afecciones, pero sobre todo no puede caminar. Cuando les dije que tenía la posibilidad de sacarlos mi madre dijo, déjenme porque no pueden hacerme nada”.
Se refiere a los talibanes, que Nadia Ghulam conoce muy bien…Tenía 11 años cuando llegaron al poder por última vez en Afganistán. Una bomba arrasó la casa de Nadia, mató a su hermano y destruyó el sustento de sus padres.
Nadia, que resultó herida en el ataque, se tuvo que hacer cargo de la supervivencia de la familia: “Decían que las mujeres no podían trabajar, no podían estudiar, no podían salir de casa. No sabía qué hacer. Mi hermano no estaba con nosotros, mi padre estaba loco con una enfermedad psicológica.
“Durante 10 años tuve que vivir como un hombre, trabajar como un hombre… Perdí mi identidad
Nadia Ghulam Escritora afgana en el exilio
Así que decidí ponerme ropa de hombre por un día. Pensé que esto sería sólo por un día, mañana las cosas cambiarán. Volveré a ser Nadia y seguiré con mi vida. Durante 10 años tuve que vivir como un hombre, trabajar como un hombre… Perdí mi identidad. Perdí parte de mi infancia, toda mi adolescencia…”.