Una gran mancha de hidrocarburos generada por el hundimiento este martes del mercante italiano “Grande América” en el Atlántico a algo más de 300 kilómetros al oeste de la ciudad de La Rochelle se dirige a las costas francesas, adonde podría llegar el domingo o el lunes próximos.
“Estamos frente a una contaminación de hidrocarburos que sin duda va a transformarse (…) y que pronto o tarde acabará forzosamente en nuestras costas”, explicó este jueves el ministro francés de la Transición Ecológica, François de Rugy.