Hace alrededor de 12.800 años, la Tierra se sumergió de repente en una mini edad de hielo, y nadie sabe realmente por qué. Una de las principales teorías es que el cataclismo fue provocado por un cometa que golpeó el planeta, y ahora, los arqueólogos creen que han encontrado un relato de primera mano de la historia registrada en los restos de un antiguo templo turco.

Al final del período Pleistoceno, las temperaturas de la Tierra cayeron en picado durante unos 1.300 años, particularmente en el hemisferio norte. Los científicos denominan a esta “Gran Helada” el Younger Dryas, y generalmente se cree que comenzó cuando las corrientes oceánicas naturales en el Atlántico Norte se cerraron por una repentina entrada de agua fría y fresca. Pero una teoría que compite dice que una colisión cósmica podría ser la culpable. Las rocas y el hielo que forman la superficie de la Tierra son una cápsula del tiempo bastante confiable de la historia geológica y climática del planeta, y en 2014 los investigadores encontraron una capa de pequeños diamantes en la capa correspondiente al período Younger Dryas.

Estos nanodiamantes solo podrían forjarse a temperaturas y presiones extremas, como la de un cometa que golpea la Tierra. La única otra capa conocida de nanodiamantes en el registro se encuentra en el límite Cretácico-Terciario, cuando un asteroide acabó con los dinosaurios. Entonces, ¿qué tiene que ver todo esto con un antiguo templo en la Turquía actual? Sorprendentemente, las tallas encontradas allí pueden ayudar a resolver el debate. Los arqueólogos que estudian el sitio de Göbekli Tepe creen que han encontrado un registro del evento apocalíptico esculpido en un pilar conocido como la Piedra del Buitre, que parece estar “estampada” con una fecha muy cercana a la del cataclismo.

La evidencia sugiere que el sitio fue utilizado como un observatorio, y otros símbolos dan una idea de los posibles efectos devastadores en las poblaciones humanas en ese momento. La piedra está adornada con imágenes de animales que parecen alinearse con las constelaciones del Zodíaco. Con esto en mente, un extraño conjunto de símbolos a lo largo de la parte superior del pilar parece apuntar a un punto específico en el tiempo, de acuerdo con cuando el sol estaba “en” esas constelaciones, y usando un software de seguimiento de estrellas llamado Stellarium, los investigadores capaz de rastrear cómo era el cielo en el momento en que Göbekli Tepe estaba en uso.

The researchers used the software Stellarium to recreate the sky as it would have looked over...

Si su interpretación es correcta, la fecha que menciona la Piedra del Buitre es aproximadamente 10.950 aC, que se alinea estrechamente con el comienzo estimado del período Younger Dryas, 10.890 a. Investigaciones previas vincularon el sitio antiguo con cometas y meteoros, y hay un símbolo particular que los investigadores dicen que parece un cometa golpeando el suelo.

Hay un hombre sin cabeza representado en otra parte de la columna, y los investigadores creen que esto podría representar la pérdida de vidas humanas que la colisión y el posterior cambio climático habrían causado. Cometa o no, generalmente se cree que el evento Younger Dryas habría perturbado enormemente el progreso de los humanos en ese momento.

“Parece que Göbekli Tepe fue, entre otras cosas, un observatorio para monitorear el cielo nocturno”, explica Martin Sweatman, autor del estudio. “Uno de sus pilares parece haber servido como memorial a este evento devastador, probablemente el peor día de la historia desde el final de la edad de hielo”. Si bien es ciertamente una hipótesis interesante, la historia se basa en mucha especulación e interpretación creativa, por lo que es mejor tomar las ideas con un grano de sal.

La investigación fue publicada en la revista Mediterranean Archaeology and Archaeometry.