Nicolás Maduro se ha convertido en superhéroe: ahora es Superbigote. Con mono azul y capa roja, al estilo de Superman, el clone del presidente venezolano salva a Venezuela de un apagón provocado por un villano inspirado en Donald Trump que maniobra contra el país desde la Casa Blanca.
Esta es la trama de la serie de animación que ha empezado a emitir la televisión pública venezolana. En el primer capítulo, divulgado esta semana, un villano sentado en la Casa Blanca con tupé rubio discute con dos conocidos opositores venezolanos —Julio Borges y Henry Ramos Allup— por haber sido incapaces de quitar a Maduro del poder.
Los políticos se defienden, diciendo que han intentado todo “pero no ven la luz”. Ahí es cuando Trump tiene la idea de enviar un “dron electromagnético” que provoque un “megapagón” en Venezuela.
Rápidamente, todo el país se queda a oscuras: las casas, los hospitales, los quirófanos, las tiendas de comida… todo se ve abocado al desastre. Pero, cuando los opositores ya están celebrando la caída del régimen, aparece Maduro, es decir, Superbigote, que destruye el dron y salva a los ciudadanos, que recuperan la electricidad, para desesperación del villano en la Casa Blanca.
El mote de Superbigote surgió por primera vez en 2019, cuando, en una rueda de prensa, Nicolás Maduro habló de las acusaciones del presidente de Ecuador, Lenin Moreno, de que Caracas estaba detrás las protestas en ese país.
En la rueda de prensa Nicolás Maduro se burló de la acusación. “Ayer salió el presidente Lenín Moreno a decir que lo que está pasando allá es culpa mía, que yo muevo mis bigotes y tumbo gobiernos, así dice Lenín Moreno, yo estoy pensando qué próximo gobierno puedo tumbar con los bigotes“, dijo en un acto de gobierno transmitido por el canal de televisión estatal VTV. “Yo no soy Superman, yo soy Superbigote”, bromeó entonces.