Las autoridades penitenciarias de Sri Lanka han recibido 102 candidatos dispuestos a trabajar como verdugos, incluyendo un ciudadano estadounidense, después de que el Gobierno decidiese reanudar la aplicación de la pena de muerte contra narcotraficantes, afirmó hoy una fuente oficial.
Imagen tomada con teléfono celular el 31 de diciembre de 2006, cuando se ahorcó a Saddam Hussein (AFP).
“Ahora vamos a procesar las candidaturas y reclutar a dos candidatos adecuados dentro de poco”, explicó el portavoz del Departamento de Prisiones de la nación isleña, Thushara Upuldeniya.
El 29 de junio de 2018 fueron ahorcados 12 detenidos en Irak (AP).
Sri Lanka busca cubrir el puesto, que ha estado vacante durante años en un país que no aplica la pena capital desde hace casi medio siglo, con dos hombres de “excelente carácter moral” de entre 18 y 45 años y que no hayan sido condenados por delitos o faltas de gravedad.
El verdugo oficial de Pakistán, Sabir Masih posa el 10 de enero de 2019. Bisnieto, nieto e hijo de verdugos, Sabir Masih ha ejecutado a unos 300 reos, un trabajo que considera “rutinario” y que no le provoca remordimientos. (EFE)
El presidente esrilanqués, Maithripala Sirisena, se ha propuesto aplicar la pena de muerte a los delincuentes reincidentes en casos de narcotráfico, para lo que ha sido necesario importar cuerda especial para las ejecuciones y buscar verdugos.
La pena capital sigue vigente en la isla para delitos como alta traición, asesinato y tráfico de drogas, aunque la última autorización presidencial necesaria para la aplicación de una condena se dio en 1976, por lo que en la práctica se conmuta por cadena perpetua.
Agencia EFE.