Sergio Ramos se ha manifiestado “rotundamente en contra” del dopaje y ha afirmado que “nunca” en su carrera futbolística ha participado de esa actividad ilegal en un comunicado difundido este sábado en el que el capitán del Real Madrid anunció además posibles medidas legales para limpiar su imagen.
“Ni en este caso, como han manifestado ya la UEFA, la AMA [Agencia Mundial Antidopaje] y el Real Madrid, ni nunca he incumplido la normativa antidopaje“, aseguró el fubolista a través del documento.
Según una revelación de ‘Football Leaks’, Ramos dio positivo por dopaje el 3 de junio de 2017 tras la final de la Liga de Campeones de ese año. También se le acusa de violar el procedimiento antidopaje en abril de este año, lo que fue igualmente desmentido por el defensor.
“Mi equipo legal estudiará tomar medidas en aquellos casos en los que se falte a la verdad y, por lo tanto, se vulneren mi reputación y mis derechos”, afirmó el seleccionado español, indicando que respeta el derecho a la información, pero también debe velar por su derecho al honor.