El Ministerio de Salud de Rusia ha denunciado el retraso en el suministro de una serie medicamentos, y asegura que no se debe a problemas con las fábricas, sino a causas logísticas.
“En cuanto al mercado farmacéutico en general, tenemos ciertas señales de retraso en los envíos”, declaró el ministro adjunto de Salud ruso, Víktor Fisenko. “Los problemas de transporte y de logística pueden aumentar el tiempo y el coste de la entrega“, agregó.
Horas antes, la empresa danesa de transporte Maersk anunció que deja de aceptar nuevos pedidos de contenedores de productos básicos procedentes de puertos rusos de San Petersburgo, Kaliningrado y Novorosíisk, o con destino a ellos, “independientemente de que la carga sea alimentaria, médica o humanitaria”.
Del mismo modo, la japonesa Ocean Network Express (ONE) anunció esta semana su decisión de dejar de aceptar reservas de transporte de contenedores hacia y desde la ciudades rusas de Novorossiysk y San Petersburgo.
Asimismo, MSC y Hapag-Lloyd se sumaron a las dos navieras y anunciaron la interrupción de sus operaciones en la zona. De este modo, MSC, con sede en Suiza, suspendió todas las reservas de carga hacia y desde Rusia, con la excepción de las de alimentos y suministros humanitarios. La alemana Hapag-Lloyd detuvo temporalmente las reservas hacia y desde Rusia.
La decisión de las mayores compañías de contenedores de suspender sus operaciones en Rusia se producen en medio de la operación militar en Ucrania, lanzada el pasado 24 de febrero por el presidente ruso, Vladímir Putin.