El país apoyó una resolución de la OEA que desconoce el segundo período del presidente venezolano, que se juramentó ayer en el Tribunal Supremo de Justicia
El presidente Nicolás Maduro juró ayer en Caracas, Venezuela, para un segundo período de Gobierno que lo mantendrá en el poder hasta el año 2025 en medio de acusaciones de ilegitimidad por la forma en que el líder chavista consiguió la reelección.
Casi de inmediato a la toma de posesión de Maduro, en Washington, DC, la Organización de Estados Americanos convocó a su Consejo Permanente para conocer una resolución en desconocimiento al nuevo mandato del presidente Venezolano, la cual fue aprobada por 19 países, entre ellos República Dominicana. La ONU dijo que seguirá trabajando con Venezuela y señaló que el organismo no se dedica a reconocer o desconocer jefes de Estado.
La toma de posesión se llevó a cabo en el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y no en el Parlamento como indica la constitución porque el Supremo declaró a la Cámara en “desacato” en 2016.
La mayoría de los países de Latinoamérica no enviaron ningún representante a la toma de posesión, igual que lo hicieron Estados Unidos y la Unión Europea. Los mandatarios de Bolivia, Evo Morales; Nicaragua, Daniel Ortega; Cuba, Miguel Díaz-Canel; El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; Osetia del Sur, Anatoli Bibílov; y Abjasia, Raul Jadyimba; (los dos últtimo no reconocidos por la ONU) encabezan la lista de dignatarios que sí acudieron al acto.
OEA y RD no reconocen legitimidad
En Washington, DC, la OEA aprobó una resolución para “no reconocer la legitimidad” del mandato del presidente de Venezuela, y llamó a que se celebren nuevos comicios “en una fecha cercana”, con observación internacional.
El organismo instaló una reunión extraordinaria de su Consejo Permanente para discutir una resolución presentada por Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, EE.UU., Perú y Paraguay, en desconocimiento del gobierno de Maduro.
El documento fue respaldado por 19 países, entre ellos 13 de los 14 integrantes del Grupo de Lima, Estados Unidos, República Dominicana, así como Bahamas, Barbados, Jamaica y Haití.
Por su lado, Venezuela, Bolivia, Nicaragua, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Dominica votaron en contra, mientras que México, San Cristóbal y Nieves, Trinidad y Tobago, Uruguay, Antigua y Barbudas, Belice y El Salvador se abstuvieron.