l Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario colombiano ha informado esta madrugada del fallecimiento de Jhon Jairo Velásquez Vásquez Popeye , como consecuencia de un “cáncer de estómago”, según estas fuentes. El que fuera jefe de sicarios del sanguinario Pablo Escobar Gaviria, líder del cártel de Medellín en los años 80 y 90 del siglo pasado, estaba ingresado desde hacía semanas en el Instituto Nacional Cancerológico de Bogotá. Ha fallecido a los 54 años de edad. Popeye fue excarcelado para poder seguir tratamiento en el hospital bajo permanente vigilancia policial.
Popeye fue ganando paulatinamente popularidad desde que salió de cárcel en 2014, después de 23 años de confinamiento forzoso, tras su entrega a las autoridades colombianas cuando la presión de las fuerzas de seguridad sobre los miembros del cártel era enorme. Contaba el ahora fallecido que su jefe, Pablo Escobar, le dio su bendición para que se entregara. Escobar fue quedándose cada vez más solo y acabó muriendo tiroteado en la azotea de un edificio bajo de la ciudad de Medellín. El llamado equipo de búsqueda, un grupo policial creado para darle caza, lo cercó en la citada vivienda acabando con su vida.
Se entregó a las fuerzas de seguridad antes de la muerte de Pablo Escobar
Popeye, con su entrega, había evitado acabar como su patrón. Y tras su largo paso por la prisión, durante el que llegó a escribir y preparar un par de libros, cuando salió a la calle en el 2014 abrió un canal de YouTube y enseguida fue ganando seguidores por miles en pocas semanas. Su mensaje era una mezcla de reivindicación y glorificación del que había sido su admirado jefe, Pablo Escobar, y de lucha contra la corrupción en su país, Colombia, como en otros países de América Latina. Fue especialmente incisivo contra el régimen venezolano de Nicolás Maduro al que acusó en vídeos y redes sociales de lazos estrechos con el narcotráfico.
Su nueva fama, que incluyó la preparación y rodaje de alguna serie de televisión, no tuvo una acogida unánime. Una parte de la ciudadanía –otra, sí– no aceptaba el nuevo papel del sanguinario sicario que decía haber superado su fase vital violenta. Hubo quien abogó desde el principio por su retorno a prisión. Popeye, desde las redes sociales, les desafió y criticó. El exacalde de Medellín, Federico Gutiérrez, por ejemplo, mostró en 2016 su indignación por el hecho de que alguien con tantas muertes a sus espaldas diera “lecciones de moralidad”. Sostuvo una pugna con Velásquez Vásquez en las redes sociales.
Retorno a la cárcel, traslado a un hospital oncológico y fallecimiento
Fue nuevamente detenido y encarcelado en mayo de 2018 acusado de nuevos delitos. Jhon Jairo Velásquez Vásquez mató unas 250 personas y participó en el asesinato de otras 1.500 a 3.000 según los cálculos de diferentes fuentes.
Muerto a los 54 años, con Popeye casi se extingue esa estirpe criminal del viejo cártel de Medellín que sembró el terror en Colombia, especialmente después de declarar la guerra al estado para forzar la retirada de la legislación que permitía a los narcotraficantes ser extraditados a Estados Unidos.