Con motivo del Día Nacional de Hungría, el primer ministro, Viktor Orbán, dio un discurso en el que reiteró su crítica contra la Unión Europea, a pocos días de la posible expulsión de su formaciónFidesz del Partido Popular Europeo. Su discurso atrajo a miles de seguidores al centro de Budapest: “Queremos un nuevo comienzo para evitar que Europa se pudra, para poner fin a la pesadilla de la idea de unas Naciones Unidas Europeas, para que Europa pueda volver a pertenecer a los europeos”.