EFE

El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, viajará el lunes a la frontera con México para visitar las obras de reemplazo de valla en Calexico (California) y dirigirse a los miembros de la Patrulla Fronteriza, encargados de la seguridad en la zona limítrofe.

La Casa Blanca informó hoy en un breve comunicado del viaje de Pence, su segunda visita a la frontera después de que en febrero se desplazara a Texas para examinar junto a miembros de su Gobierno la zona del Valle del Río Grande, uno de los puntos más usados por los inmigrantes para cruzar.

Pence se dirigirá a los miembros de la Patrulla Fronteriza el lunes en la base de la Armada de Estados Unidos llamada El Centro, en la ciudad Imperial (California) y que sirve de sede a la Patrulla Fronteriza con la responsabilidad de vigilar 56 kilómetros de los 3 mil 180 que separan a Estados Unidos de México.

Además, el vicepresidente recibirá información sobre el proceso de construcción del muro y visitará el proyecto de reemplazo de valla fronteriza en Calexico.

Foto: AFP

El presidente estadounidense, Donald Trump, generó polémica el pasado mes de marzo cuando se refirió en Twitter a las obras en Calexico, aprobadas en 2009, antes de su llegada al poder, para presumir que ya había comenzado a construir el muro que prometió durante la campaña para las elecciones de 2016.

Trump visitó en marzo los prototipos del muro con México que han sido construidos cerca de San Diego (California).

Seis empresas han construido ocho prototipos posibles para el muro en un lugar situado a escasos metros del terreno que divide Otay Mesa (California, Estados Unidos) y Tijuana (México), y el Gobierno estadounidense comenzó a evaluarlos el pasado 1 de diciembre.

Según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), el muro con México será el resultado de la unión de una serie de características de los prototipos, de forma que, por ejemplo, las autoridades juntarán la altura de un modelo con los mecanismos antiescalada de otro y, como resultado, designarán la muralla.

Los prototipos del muro fueron construidos con un presupuesto de 20 millones de dólares que asignó el Congreso.

En marzo, Trump consiguió que el Congreso le diera mil 600 millones para su proyecto del muro, aunque el Legislativo incluyó numerosas limitaciones, como que los fondos solo se usen para vallas y no para muros de hormigón.