Las manifestaciones que se han dado en las últimas horas en diversas ciudades de Rusia para exigir la liberación del opositor Alexei Navalny se han saldado con más de 3.000 detenidos, entre ellos, Yulia Navalnaya, pareja del disidente arrestado hace una semana tras regresar de Alemania.
En el país se habla de movilizaciones sin precedentes, tanto en Moscú, con unos 15.000 manifestantes, como en otro centenar de ciudades, como San Petersburgo, donde han participado otras 5.000 personas.
“Fue una protesta a escala de todo el país. Le mostramos a Putin nuestra fuerza“, afirmaron los seguidores del opositor. En su opinión, la jornada significó “una victoria del valor y el espíritu sobre el terrorismo de estado“.
Manifestación en apoyo a Navalni en Moscú. Reuters
Según OVD, el número actual de detenidos es de 3.068, la gran mayoría en Moscú (1.167), mientras que en San Petersburgo fueron 466 los arrestos. Asimismo, al menos 40 agentes de Policía han resultado heridos durante las protestas solo en la capital, Moscú. Las heridas, según fuentes de seguridad, tienen carácter leve. También habría decenas de heridos entre los manifestantes.
Entre los detenidos, está, además de la pareja de Navalny, una de sus principales aliadas: la política y abogada del Fondo de Lucha contra la Corrupción (FBK), Liubov Sobol, que fue arrestada recurriendo a la fuerza mientras hacía declaraciones a los medios de comunicación.
Los manifestantes, convocados por distintos grupos opositores, han coreado consignas como “¡Libertad para Navalny!” o “¡Putin, márchate!”. Jóvenes en su gran mayoría, han respondido al amplio dispositivo de seguridad saltándose las vallas y lanzando bolas de nieve y petardos contra los agentes, que han respondido con cargas con la porra.
Uno de detenidos en Moscú, en una marcha en apoyo a Navalni. Reuters
Periodistas y activistas han denunciado además la caída de Internet, pese a lo que se han difundido vídeos de policías cargando con porras contra los manifestantes.
Tras la manifestación en el centro de Moscú, cientos de manifestantes se han desplazadado hasta la prisión donde se encuentra retenido Navalny. Tras una hora de caminata se han concentrado en este lugar y se han producido nuevos incidentes violentos, según los vídeos difundidos por Telegram por el propio equipo de Navalny.
En las imágenes se pueden ver a agentes de la unidad de operaciones especiales OMON golpeando y pateando a manifestantes mientras otros gritaban “¡Vergüenza!”.
El equipo de Navalny llamó a sus seguidores a no dejarse amedrentar por “los propagandistas” del Estado y prometió reembolsar las multas impuestas por las autoridades. Ya hay convocatorias de nuevas movilizaciones para la próxima semana.
UE
En respuesta a estos incidentes, el Alto Representante de la Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Josep Borrell, ha expresado su “preocupación” por los arrestos”. “Sigo los acontecimientos de Rusia con preocupación. Condeno las detenciones generalizadas, el uso desproporcionado de la fuerza, el corte de Internet y las conexiones telefónicas. Este lunes abordaremos las medidas a tomar con los ministros de Exteriores de la UE”, ha apuntado.
Navalny podría ser condenado hasta a tres años y medio de prisión en una vista programada para el 2 de febrero. Está acusado de incumplir las condiciones de su libertad provisional y se han presentado cargos por los que podría ser condenado a hasta diez años de prisión.