Peter O’Brien, el Jugador Más Valioso de la serie regular, apenas batea .200 en la final, pero sus cuatro imparables en 20 turnos han llegado en el momento oportunos para definir dos de los triunfos de los Toros y estar involucrados en los tres.
El viernes en el Francisco Micheli con 8,834 fanáticos en las tribunas, el inicialista cubanoestadounidense rompió la igualdad en el sexto capítulo con un imparable al central y los Toros retomaron el control de la final con su triunfo 3-1 sobre el Licey.
Ya en el juego dos, un doblete suyo, con el choque igualado a tres abriendo la entrada 11 precedió el cuadrangular de Jeimer Candelario para el triunfo 6-3. En el juego tres, su cuadrangular rompió el empate 3-2 y los taurinos nunca más se vieron debajo.
En el quinto juego los dirigidos por Lino Rivera consiguieron cuatro buenas entrada del veterano Frankie de la Cruz (tres hits, una vuelta, una base y tres ponches) y su relevo frisó los bates azules en seis inings.
El triunfo fue para Tim Peterson, el revés para un Mauricio Cabrera que no pudo sacar un out mientras aceptaba tres imparables y dos vueltas y el rescate para Ramón Ramírez.
El viernes al igual que O’Brien, Candelario, Junior Lake y Jorge Mateo fueron oportunos con el madero y corridos de las bases, en una noche de ocho imparables.
“Las cosas salieron con De La Cruz. Quise hacer unos cambios en el line up para ver si nos embazábamos más colocando a (Jordany) Valdespín de tercero y sentar a (Abraham) Almonte que está en un slump y salieron”, dijo Rivera tras el choque. “El juego del domingo será bien importante para nosotros en el Quisqueya, voy con Carlos Hernández y el lunes con Raúl Valdés”.
Nueva vez al Licey le faltó el bateo situacional en un choque donde su abridor cumplió. El cubano Yoanys Quiala tiró cinco episodios de cuatro hits, una vuelta, una base y un ponche, pero Cabrera falló.
Los azules se fueron con el madero de 7-0 con corredores en posición de anotar y dejaron a siete hombres a la espera de remolque. Los primeros cuatro bateadores (Emilio Bonifacio, Erick Aybar, Hanley Ramírez y Eric Filia) se fueron de 15-2.
El sexto partido de la final será el domingo a partir de las 5:00 de la tarde en el Quisqueya.
Así anotaron
Los felinos se adelantaron en el marcador. Lo hicieron en la segunda entrada. Jorge Bonifacio abrió con doblete al jardín izquierdo, avanzó hasta la tercera con rodado por segunda de Sócrates Brito que Wendell Rijo no pudo manejar y anotó el 1-0 con piconazo lento al campo corto de Donovan Solano.
La igualdad taurina llegó al cierre del tercero. Mateo inició el inning con sencillo por la antesala, una línea que se incrustó en el prado izquierdo. Mateo se estafó la segunda base, llegó a la antesala con imparable por el torpedero de Rubén Sosa y pisó el plato con rodado al campo corto de Lake.
El choque se mantuvo empatado, con más opciones para los Tigres, hasta que en el sexto los Toros encontraron la brecha. Lake recibió a Mauricio Cabrera con sencillo al derecho, Valdespín despachó imparable detrás de primera que colocó hombres en las esquinas y Peter O’Brien soltó inatrapable productor al central que puso el 2-1. Subió al montículo Brennan Bernardino, que toleró elevado profundo de sacrificio al left a Candelario, productor de la tercera vuelta local.
La tuvo el equipo añil para acercarse en el séptimo, pero no capitalizó. Brito abrió con hit ante Jarlin García, Solano falló con elevado al left, pero Michael de la Cruz disparó imparable al izquierdo. Michael de León sacó rodado por segunda que forzó el out en la intermedia y la amenaza terminó con línea al central de Emilio Bonifacio.