La Policía Federal brasileña encontró “indicios de la práctica del crimen de organización ilícita criminal” en la cúpula del gobernante Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) en la Cámara de Diputados y acusó el presidente Michel Temer de ser el líder del grupo. La Policía envió este lunes a la Corte Suprema el informe de la investigación sobre si los integrantes de la cúpula del PMDB en la Cámara Baja formaron una cuadrilla para desviar recursos públicos.
La Policía Federal aseguró haber identificado situaciones en las que Temer “utiliza” a Moreira Franco (ministro de la Secretaría del Gobierno) y Eliseu Padilha (ministro de la Presidencia), así como el exministro (actualmente preso) Geddel Vieira Lima para lograr sus propósitos, “como la captación de recursos” de empresas privadas.
Según el texto, “el grupo mantenía una estructura organizada con el objetivo de obtener directa e indirectamente ventajas indebidas en órganos de la administración pública directa e indirectamente”.
Entre los delitos cometidos por el grupo habría corrupción activa y pasiva, lavado de dinero, fraude en licitaciones y evasión de divisas, entre otros.Tras recibir el informe, la Corte Suprema lo enviará a la Fiscalía, que si acepta los argumentos de la policía, presentará una denuncia contra todos los implicados.
LA DENUNCIA DEL FISCAL
El informe de la Policía Federal llega tres días después de que el fiscal general, Rodrigo Janot, denunciara también por asociación ilícita a la cúpula en el Senado del PMDB. Janot incluyó entre los acusados ante la Corte Suprema a un grupo de senadores, entre ellos el expresidente de la Cámara Alta Renan Calheiros y el exministro Romero Jucá, quienes han recibido diversas denuncias por corrupción en las últimas semanas, así como el exmandatario brasileño José Sarney.
De acuerdo con la Fiscalía, existen indicios de que los políticos denunciados mantenían el control sobre la Dirección Internacional de Petrobras con el fin de recibir sobornos de los proveedores de la estatal.
Según las investigaciones, el grupo integrado por siete políticos recibió 864,5 millones de reales (unos 279 millones de dólares) en sobornos, generando un perjuicio para Petrobras de 5.500 millones de reales (unos 1.779 millones de dólares) y para su filial Transpetro de 113 millones de reales (36,5 millones de dólares).
Janot presentó hace unos días una denuncia similar ante el Supremo contra políticos del Partido de los Trabajadores (PT), entre ellos los expresidentes Luiz Inácio Lula da Silvay Dilma Rousseff y la senadora y dirigente de la formación, Gleisi Hoffmann.
El fiscal, cuyo mandato finaliza el próximo domingo, también prepara nuevos cargos contra el presidente Michel Temer, quien ya fue acusado por el fiscal de corrupción pasiva, aunque la denuncia fue rechazada por la Cámara baja.
Temer se libró del juicio penal gracias al claro respaldo de legisladores de los partidos que apoyan su Gobierno y a que la legislación establece que el Supremo Tribunal Federal sólo puede abrirle un proceso al jefe de Estado en caso de que la Cámara de Diputados lo apruebe.