El clítoris, el botón para alcanzar el orgasmo femenino, ha sido el órgano femenino más maltratado de la historia. Relegado al olvido por considerarlo inútil e ‘infantil’ (Sigmund Freud decía que el placer obtenido a través de él era “inmaduro y propio de la niñez”), siempre ha estado a la sombra del coito y la estimulación vaginal, la única vía para alcanzar el éxtasis.

Ahora un investigador de la Universidad de Sheffield, en Reino Unido, le atribuye una segunda función. Publicado en la revista Clinical Anatomy, el estudio muestra que la estimulación del clítoris activa al cerebro y lo hace para generar cambios en el tracto reproductivo femenino.

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Según el trabajo, la excitación de la mujer activa su cerebro para producir una serie de cambios físicos que convierten la vagina en un entorno más adecuado para la fecundación. (Foto: Getty)

Lo cual viene a confirmar los resultados de otros estudios recientes que han demostrado que el clítoris causa activación en todos los sistemas cerebrales principales, incluidas las áreas involucradas en la excitación, la recompensa, la memoria, la cognición y el comportamiento social.

Capacidad de transportar y retener esperma masculino

Allí se produce todo un proceso que hace que mejore el flujo sanguíneo vaginal y su temperatura, que haya una mayor lubricación e incluso un cambio en la posición del cuello del útero para que la fertilización sea posible.

Aumento del flujo sanguíneo, de la lubricación, subida de la temperatura y del nivel de oxígeno de los genitales y, sobre todo, una variación en la posición del cuello del útero que evita que los espermatozoides entren en él demasiado rápido. Con todos estos cambios se consigue que las células reproductoras masculinas se activen y ganen movilidad para fertilizar el óvulo, detalla en el estudio.

Al acercarse a un orgasmo, el exterior de la vagina también puede formar una ‘plataforma orgásmica’, levantando el útero para acomodar el esperma, y ​​durante un orgasmo, los músculos del piso pélvico se contraen rítmicamente.
Al acercarse a un orgasmo, el exterior de la vagina también puede formar una ‘plataforma orgásmica’, levantando el útero para acomodar el esperma, y ​​durante un orgasmo, los músculos del piso pélvico se contraen rítmicamente.

“El mantra a menudo repetido de que la única función del clítoris es inducir el placer sexual, ahora es obsoleto“, asegura el autor principal del estudio, el doctor Roy Levin. “El concepto cambia una creencia sexual importante, y la evidencia fisiológica ahora es evidente”.

Levin piensa que esto es un gran descuido. Ya que, analizando investigaciones recientes, el clítoris existe igualmente para el disfrute y la reproducción.

Consecuencias importantes para la natalidad

Además, con este trabajo, los científicos buscan demostrar que la extirpación del clítoris que se realiza en algunas culturas, además de una aberración, puede ser causante de una disfunción en las capacidades reproductivas de la mujer.

Todo esa serie de eventos que ocurren al estimular el clítoris, es sumamente importante para facilitar el éxito reproductivo. “Por lo tanto, el clítoris tiene funciones procreadoras (reproductivas) y recreativas (de placer). La extracción del clítoris que se realiza en algunos países y culturas, crea no sólo una discapacidad sexual sino también una posible discapacidad reproductiva”, concluye la investigación.