“Gracias por no dejarme estar sola, por creerme hermanas”, señala la joven en una carta enviada a un conocido programa de televisión, en la que reitera su agradecimiento a toda la gente que ha hablado sobre su caso.
Nadie tiene que pasar por esto, lamentarse de beber, de hablar con gente en una fiesta, de ir sola a casa o de llevar una minifalda
La polémica sentencia judicial que condenaba por abuso y no por agresión sexual (equivalente a violación) a los cinco miembros de “La Manada” y su posterior puesta en libertad provisional hace unos días, generó una explosión de indignación y rechazo en la sociedad española que trascendió también al terreno político.
Desde que se hizo público el fallo, el pasado abril, miles de personas, la mayoría mujeres, han tomado las calles de las principales ciudades del país en multitud de ocasiones para protestar por una decisión que ven producto de una “Justicia patriarcal”.
“No os quedéis callados porque si lo hacéis les estáis dejando ganar”, argumenta en la carta la víctima de “La Manada”, que destaca que de una situación como la de ella “se puede salir”.
La joven, que en el momento de los hechos tenía 18 años, asegura que se da por satisfecha si gracias a su caso se han “removido conciencias” o ha dado “fuerzas” a otras personas, por lo que pide a otras víctimas que cuenten su caso, ya sea a un familiar, a un amigo, a la policía o simplemente a través de un tuit.
No os quedéis callados porque si lo hacéis les estáis dejando ganar
“Nadie tiene que pasar por esto, lamentarse de beber, de hablar con gente en una fiesta, de ir sola a casa o de llevar una minifalda“, subraya en la carta. Además, pide “no bromear con una violación” al igual que no se hace con las enfermedades porque es “indecente”.
En la misiva, encabezada con la frase “De víctima a superviviente y de ahí a mujer valiente”, la joven también dice que “lo mejor y peor de la vida hay que compartirlo”.
“Tened cuidado con lo que decís, no sabéis cuántas veces he oído hablar sobre “la chica de San Fermines” sin saber que esa chica era la que estaba sentada a su lado.Y por cierto, no soy “la chica de San Fermines”, soy la hija de…, la nieta de…, la amiga de… y, a lo mejor ese “de”, sois unos de vosotros, así que por favor, pensad antes de hablar”.
Finalmente insiste en dar las gracias a su familia y amigos, al igual que a asociaciones, ciudadanos, personalidades políticas, famosos y periodistas que le hayan respetado y, en general, a todo el que se haya preocupado por ella, la víctima.
La carta de la joven llega tras la expectación mediática que ha supuesto la salida de la cárcel de los miembros de “La Manada”, rodeados de prensa cada vez que acuden, tres veces por semana, a firmar su libertad condicional, una de las medidas cautelares impuestas por el tribunal que les juzgó.
Desde que los cinco acusados abandonaron las prisiones en las que pasaron dos años, se han disparado los rumores sobre supuestas ofertas televisivas que les pagarían por conceder entrevistas, por lo que organizaciones feministas llamaron a boicotear al medio que lo haga.