Los republicanos han impulsado este nuevo presupuesto para tratar de satisfacer al presidente Donald Trump, quien anunció que no rubricaría el anterior, acordado por los dos partidos, porque no incluía financiación para el muro, aunque eso supusiera colocar sobre el país la espada de Damocles de un posible cierre de la administración por falta de fondos.
Las nuevas cuentas fueron aprobadas con 217 votos a favor, todos republicanos, y 185 en contra, de los demócratas en bloque y ocho congresistas conservadores.
“Gracias a nuestros fantásticos republicanos” ha dicho el presidente en un tuit, en el que se felicita por el resultado de la votación en el Congreso.