El salario mínimo aumentó de 4.5000 bolívares a 18.000 bolívares mientras que el bono de alimentación, situado en Bs 450, quedó en 1.800 dando un total de 19.800 bolívares (unos 7 dólares). Se trata de un 400% de aumento.

El chavista no hizo referencia a la hiperinflación, sino que Maduro informó desde ahora la criptomoneda Petro pasará a valaer 36 bolívares soberanos, y por ende, se ve obligado a reajustar el salario mínimo en 18 mil Bs S, equivalentes a medio petro.

Según detalla El Nacional, en 2018, Maduro anunció cinco aumentos salariales. El primero de ellos fue en el mes de enero, el segundo en marzo, el tercero en el mes de abril, el cuarto en junio y el quinto en noviembre.

El ajuste, que se aplicará a partir del 15 de enero, es la primera de las medidas que anuncia Maduro durante su discurso de gestión frente a la Asamblea Nacional Constituyente, días después de asumir su segundo mandato.

“Me siento orgulloso de ser chavista, de ser el primer presidente chavista de esta era histórica del siglo XXI. Este plan combina las líneas históricas de nuestro comandante Chávez con las líneas estratégicas que han surgido al calor de la batalla de estos años”, aseguró Maduro durante la presentación del Plan de la Patria 2019-2025.

El anuncio llega en medio de la peor crisis económica que haya sufrido en su historia moderna el país con las mayores reservas petroleras del mundo. De hecho, expertos auguran un agravamiento de la debacle socioeconómica por el aislamiento internacionalAdemás de la escasez de comida y medicinas, los venezolanos lidian con una una hiperinflación que según el FMI alcanzará el 10.000.000% en 2019.

En lo que considera la migración más masiva de América Latina en décadas, la ONU calcula que 2,3 millones de venezolanos emigraron desde 2015 y estima que esa cifra subirá a 5,3 millones en 2019.

Durante el gobierno de Maduro, la economía se redujo a la mitad y se contraerá un 5% en 2019, según el FMI. Además, el país y su petrolera cayeron en default y la producción de crudo, fuente de 96% de las divisas, se desplomó a 1,4 millones de barriles diarios, la más baja en 30 años.