El diputado opositor Juan Guaidó, autoproclamado ‘presidente encargado’ de Venezuela, asegura que las últimas protestas opositoras fueron exitosas pese a su baja participación, y afirma que la fallida rebelión militar contra Nicolás Maduro pone en evidencia serias debilidades en su Gobierno.
“Hubo gente que faltó por cumplir […] y no quiere decir que no lo hagan, por cierto, no quiere decir que no lo hagan pronto”, indicó Guaidó en entrevista con AFP una semana después de que su llamado a un golpe de Estado no surtiera efecto. “Estamos esperando que muchos más no solamente cumplan con su palabra, sino con su país”, añadió.
El presidente de la Asamblea Nacional (AN) en desacato asevera que este intento de sublevación “visibiliza claramente la ruptura en la Fuerza Armada” y “el descontento que hay, no solamente en los altos mandos”. Asimismo, responsabiliza al “derrotado, aislado y solo” Maduro de que esta “transición” resulte en un alto costo social relacionado con la falta de comida y medicinas.
En cuanto a las manifestaciones del pasado sábado, que contaron apenas con la presencia de un centenar de adeptos, Guaidó se mostró conforme. “La protesta se cumplió. Un gran objetivo era reencauzarla hacia la no violencia”, señaló el diputado, subrayando que “no hubo represión” en la mayoría de los puntos en que se realizó.
Guaidó enfatizó que espera un cambio de Gobierno pacífico para su país, pero reiteró que “la otra opción” corresponde a una “salida de fuerza” con apoyo de EE.UU. Añadió que, entretanto, su libertad se encuentra en “riesgo latente”: “Secuestrarme [equivaldría a] dar un golpe de Estado porque soy el presidente encargado. No nos amedrentamos […]. Están al borde del colapso“, acotó.