Santo Domingo.– El Centro Nacional de Huracanes informó que el huracán Fiona tocó tierra a las 3:30 de la mañana en la República Dominicana cerca de Boca de Yuma con vientos máximos en 90 kilómetros por hora.
La directora de la Oficina Nacional de Meteorología, Gloria Ceballos, explicó que Fiona estaría en nuestro territorio por unas doce horas y al momento de salir, se prevé que su categoría aumente a dos.
A las cuatro de la madrugada el centro de Fiona se ubicó a unos 20 kilómetros al suroeste de Punta Cana. Los vientos huracanados se extienden a unos 45 kilómetros fuera de su centro y los de tormenta a unos 220 kilómetros, y se mueve hacia el oeste/noroeste a unos 15 kilómetros por hora, esto según datos que publicó la Onamet en su cuenta de twitter.
Los vientos huracanados se extienden a unos 45 kilómetros fuera de su centro y los de tormenta a unos 220 kilómetros.
En Punta Cana se registran lluvias y un descenso de la presión atmosférica y se ha reportado una ráfaga de viento de 93 kilómetros/hora.
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A medida que Fiona continúe su avance, se espera que vientos con esta intensidad y superiores se extiendan al resto de La Altagracia y a otras provincias.
Los modelos numéricos de predicción indican que Fiona generará acumulaciones de lluvias que oscilaran entre 100 y 300 milímetros, aunque podrán ser superiores en puntos aislados y llegar a 450 milímetros, por lo que se mantiene el aviso por inundaciones urbanas, crecidas de ríos, arroyos y cañadas, así como por deslizamientos de tierra.
Dada la dimensión del huracán, se prevé que gran parte del país esté bajo los efectos, el cual, al alejarse de territorio dominicano, se espera que lo haga con categoría 2 en la escala Saffir-Simpson, sobre un máximo de 5.
Todas las provincias de República Dominica están en alerta, de ellas trece en nivel rojo, el mayor, incluido el Gran Santo Domingo.
El Ejecutivo dominicano ha declarado este lunes día no laborable para intentar minimizar los riesgos.
Fiona desplegó el domingo toda su furia sobre Puerto Rico, donde sus fuertes lluvias causaron un apagón general, graves inundaciones y daños catalogados de «catastróficos».
