D’neil Schmall, una enfermera estadounidense que se mudó a Nueva York para ayudar a pacientes con covid-19 que ingresan de urgencia en la unidad de cuidados intensivos, grabó un video en el que explica entre lágrimas los detalles de su trabajo al final de su turno laboral.
Ese jornada le resultó “muy difícil”, ya que resultó “un día realmente duro” porque terminó “cansada de entrar en habitaciones donde los pacientes están muertos: simplemente, entras en una y hay un cadáver”, se lamentó esta mujer de 35 años.
En el subtítulo de este documento gráfico que publicó en su perfil de Facebook, Schmall explicó que lloró durante una hora antes de recuperar la calma para registrar su relato en la habitación de su hotel.
Esta trabajadora sanitaria detalló que tanto sus compañeros como ella duermen de 4 a 5 horas y caminan “de 13 a 17 kilómetros en un turno de 13 a 15 horas, 5 o 6 días a la semana”, cada enfermero tiene asignados “entre 10 y 16 pacientes” y “la mayoría” de sus equipos de protección personal son “de plástico”.
Una de las peores partes de su trabajo es decirle a las familias que sus seres queridos han muerto, ya que quienes componen el personal médico “también son humanos”, así que “ahora es el momento en que todos deberíamos tener compasión el uno por el otro y, al menos, tratar de reconocer por qué pasa otra persona”.
“Siento tanta tristeza por mis compañeros enfermeros, hermanas y hermanos, que han perdido la vida cuidando a las personas”, lamentó D’neil Schmall, quien agregó que no cree que “la gente entienda lo estresante que es este trabajo”.