ONDRES.- Un pequeño grupo de 50 solicitantes de asilo fue trasladado hoy a la mañana por primera vez a la barcaza Bibby Stockholm, anclada en el puerto de Portland, al sur de Inglaterra mientras el gobierno británico intenta reducir el costo de albergar a las personas que buscan protección en el país.
Los solicitantes de asilo fueron trasladados a la barcaza equipada con alojamiento básico y temporal en la cual se albergarán hasta 500 personas trasladadas desde hoteles o cualquier otro lugar del país. Se prevé que arriben más en el transcurso del día. Los refugiados, de entre 18 y 65 años, serán alojados en la barcaza de tres plantas mientras esperan el resultado de su solicitud de asilo.
La barcaza, propiedad de una empresa sueca, se utilizó anteriormente para albergar a trabajadores de campos petroleros y migrantes en otros países. Sin embargo, la principal diferencia es que su capacidad, que antes era de 222 plazas, se ha duplicado hasta 500 al instalar literas en sus camarotes y convertir algunas salas comunes en dormitorios para entre cuatro y seis hombres.
El gobierno del Reino Unido quiere utilizar barcazas y antiguas bases militares para albergar a algunos inmigrantes a medida que aumenta el costo de alojarlos en hoteles.
La ministra del Interior, Sarah Dines, le dijo a la BBC que las personas que llegan al Reino Unido por medios no autorizados deben tener un “alojamiento básico pero adecuado” y que “no pueden esperar quedarse en un hotel de cuatro estrellas”.
La ministra explicó que el aumento del número de personas en el barco sería “gradual”, con la posibilidad de llegar a 500 al final de la semana, a pesar de la preocupación del Sindicato de Bomberos por el hecho de que el buque había sido diseñado originalmente para albergar a unas 200 personas.
Un funcionario de prensa del Ministerio del Interior declaró posteriormente que la Sra. Dines se había expresado mal al sugerir que podría haber 500 personas a bordo al final de la semana. Se trataba de una cifra general que esperan que haya en el barco en algún momento, aclararon más adelante.
Polémica
El primer ministro, Rishi Sunak, ha hecho de la lucha contra la inmigración ilegal una de sus principales prioridades de cara a las elecciones nacionales previstas para el año que viene, presentando a sus conservadores como más duros en esta cuestión que el opositor Partido Laborista, que goza de una fuerte ventaja en las encuestas de opinión.
Para disuadir a la gente de llegar a Gran Bretaña, está trasladando a los inmigrantes a instalaciones militares en desuso y a barcazas como la gris Bibby Stockholm. También está intentando enviar solicitantes de asilo a Ruanda, aunque ese plan se ha visto empantanado en cortes y aún depende de una sentencia del Tribunal Supremo sobre su legalidad.
Más de 50.000 solicitantes de asilo están viviendo en hoteles tras realizar la última parte de su viaje en pequeños botes inflables a través del Canal de la Mancha desde Francia. El gobierno afirma que los hoteles están costando más de 6 millones de libras (7,6 millones de dólares) al día.
La política ha dividido a las comunidades locales, y algunos han calificado de inhumano el alojamiento de personas llegadas de países como Irak, Irán, Siria, Afganistán o Albania. Otros se han indignado por el impacto en los servicios locales y se han preguntado si los lugares se convertirán en blanco de protestas.
Las autoridades locales informaron el lunes de que estaban investigando las cartas enviadas a algunas personas y empresas de los alrededores del puerto de Portland, en las que se sugería que podrían ser objeto de ataques si ofrecían apoyo a los solicitantes de asilo en la barcaza.
“El bienestar de los solicitantes de asilo a nuestro cargo es de la máxima importancia”, dijo un portavoz del Ministerio del Interior.
Las cifras del gobierno muestran que casi 46.000 solicitantes de asilo hicieron la peligrosa travesía de Francia a la costa sur de Inglaterra en pateras el año pasado. En lo que va de 2023, el número asciende a casi 15.000.
Interior
El buque, que está anclado en el puerto de Portland, cuenta con habitaciones individuales con baño privado y ducha en cada una de las tres plantas. Hay una sala de televisión con una pantalla grande y sofás y un espacio recreativo al aire libre en los dos patios en el centro de la barcaza.
Los hombres recibirán atención médica a bordo de la barcaza o de forma remota, suministrada por un equipo de expertos, según informó el Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés), luego de las preocupaciones expresadas por los habitantes sobre el impacto que tendrían más personas en los servicios de salud locales.
El Gobierno dice que actualmente gasta US$7 millones al día en el alojamiento en hoteles de más de 50.000 inmigrantes. El Ministerio del Interior dice que para el otoño, su objetivo es albergar a unos 3000 solicitantes de asilo en lugares que no sean hoteles, como la barcaza y los antiguos sitios militares Wethersfield en Essex y Scampton en Lincolnshire.
Agencias AP y ReutersLA NACION
