El parlamento de Kenia autorizó el jueves el despliegue de 1,000 policías en Haití para ayudar a manejar la creciente violencia de pandillas en la nación caribeña.
La asamblea nacional respaldó una moción archivada por el Comité de Administración y Seguridad Interna que aprobó la petición del gobierno de enviar agentes ante el aumento de la violencia en Haití.
En un encendido debate, legisladores de la oposición rechazaron los planes del gobierno de que Kenia lidere una fuerza multinacional en Haití, con el argumento de que incumplía la constitución del país. Los partidarios de la iniciativa dijeron que Kenia tenía el deber y la obligación moral de ayudar a Haití.
El proyecto fue bloqueado en octubre por el Alto Tribunal en Nairobi. La corte tenía previsto pronunciarse el jueves en un caso presentado por el excandidato a la presidencia Ekuru Aukot, que dijo que la misión, respaldada por Naciones Unidas, era “un error y una misión suicida”.