Un auto de carreras GT3 listo para salir del circuito y salir a la calle, el nuevo Mustang GTD es el “Mustang más avanzado y audaz jamás creado”, según las personas que lo construyeron. El nuevo cupé absolutamente increíble presenta un cambio de imagen completo en fibra de carbono, aerodinámica activa de parachoques a parachoques, una suspensión adaptable para calle/pista, la primera en su tipo, y un V8 sobrealimentado que impulsa las ruedas traseras a través de un eje de transmisión de fibra de carbono. Si crees que parece furioso estando quieto, espera hasta que gire por debajo de 7 alrededor de Nürburgring.
Comenzado en 2021 como una especie de proyecto de skunkworks fuera del horario laboral en lo profundo de un garaje de almacenamiento de Ford, el Mustang GTD encontró vida como un objetivo simple pero no tan simple: crear un Mustang para competir con los mejores autos deportivos europeos.
A partir de ahí, el pequeño grupo de pluriempleados seleccionados a mano se asoció con el proveedor canadiense Multimatic para reducir el Mustang legal para la calle a una silueta básica, rediseñar prácticamente todos los paneles y componentes principales y reconstruirlo junto con el automóvil Mustang GT3 con el que se creó. comparte inspiración y hardware. El GT3 competirá en Le Mans el próximo año, mientras que el GTD “irá más rápido en una pista con más tecnología que los autos de carreras en los que se basa”.
La carrocería del GTD cuenta gran parte de la historia sin necesidad de una sola palabra: faros delanteros con el enfoque nítido de un láser, partes aerodinámicas de la carrocería que sobresalen de cada esquina y un alerón trasero que parece sacado de un cementerio de aviones. Debajo de ese borde de fuga de alto vuelo, lo que normalmente sería un baúl ahora es el sistema de suspensión semiactiva, los componentes de control del alerón trasero hidráulico y el hardware de enfriamiento del transeje, cubierto por una tapa inspirada en las carreras con tomas de aire funcionales que canalizan el viento que sale. el cristal trasero.
Otros componentes aerodinámicos estándar y disponibles incluyen un divisor delantero, guardabarros ventilados, difusor trasero, bandeja aerodinámica debajo de la carrocería y faldones laterales, todos hechos de fibra de carbono para ahorrar peso. Ford incluso agrega algunos componentes activos que serían ilegales en las carreras, incluidas las aletas delanteras controladas hidráulicamente.
El capó y el techo también están hechos de fibra de carbono, lo que ayuda a mantener el peso total bajo y centrado cerca del suelo. Un eje de transmisión de fibra de carbono garantiza que el peso se equilibre alrededor de una distribución delantera/trasera 50:50 mientras envía potencia desde el V8 sobrealimentado de 5.2 litros montado en la parte delantera a las ruedas traseras a través de una transmisión trasera de doble embrague y ocho velocidades. Cuando se alimenta con combustible premium, ese V8 genera hasta 800 caballos de fuerza y hace que Ford apunte al tipo de tiempo de Nürburgring inferior a 7 segundos generalmente reservado para los vehículos especialmente afinados de marcas europeas conocidas como Mercedes, Lamborghini y Porsche.
Ford hace algunos ajustes especiales por su cuenta para garantizar que el Mustang pueda atravesar las curvas implacables de Nordschleife, agregando el primer sistema de aceite de motor de cárter seco para un Mustang de carretera para mantener todo lubricado en las curvas exigentes. El sistema de suspensión semiactiva que Ford llama el primero de su tipo cambia entre dos velocidades de resorte y alturas de manejo (carretera y pista) utilizando el sistema de amortiguación de válvula de carrete adaptativo de Multimatic.
El modo Track permite una caída de altura de casi 40 mm (1,6 pulgadas). El conductor puede gestionar el control de tracción a través del primer sistema de control de tracción variable de Ford, disponible en modo pista. El sistema permite al piloto modular la potencia del motor y la entrada del control de tracción a través de controles montados en el volante, haciendo coincidir los ajustes con su capacidad de conducción y las condiciones de la pista.
