Desde la Dirección General de Dragas, Presas y Balizamiento no se podía apreciar el Interceptor 004, la embarcación que está sirviendo como “camión de la basura acuático” en el río Ozama, donado por los Países Bajos.
Desde ese punto, una yola con permisos especiales conducía hasta el aparato, que se encuentra anclado justo en el extremo derecho del barrio Domingo Savio, compuesto por La Ciénaga y Los Guandules, del Distrito Nacional.
Bajo el candente sol del mediodía, un equipo de reporteros de LISTÍN DIARIO, acompañado de Germán Bello Peralta, encargado de operaciones del interceptor, miembros del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Armada Dominicana, zarpó para indagar sobre los avances del proyecto, luego de que hace unas semanas se presenciara en la playa de Montesinos una gran cantidad de desechos plásticos que bajaron del río.
El recorrido duró un poco más de 20 minutos. El bote salió rodeado de lilas desde el muelle de dragas y cruzó tres de los cuatro puentes que están sobre el río: el puente Ramón Matías Mella o de las Bicicletas, el Francisco del Rosario Sánchez y el Flotante. Al salir por debajo de este último, a primera vista fue observado El Interceptor.
Al pisar la embarcación con forma de catamarán se sentía el hedor de los desechos recolectados. Los seis gigantescos contenedores estaban casi a su máxima capacidad (resisten 1.5 toneladas). Bello la puso en marcha. Cuando se pensaba que la máquina iba a emitir algún ruido, comenzó a operar de forma silente y así se mantuvo durante el tiempo de permanencia, esto debido a que emplea mecanismos alimentados por energía solar.
Tras casi dos años y medio después de empezar a operar, el Interceptor 004 ha recolectado 220 toneladas de residuos sólidos del río Ozama, reveló en reunión con LISTÍN DIARIO Rosa Rijo, quien forma parte del Viceministerio de Desarrollo Social del Ministerio de la Presidencia.
Aunque inició con retraso debido a que fue removido por el huracán María en 2020, según explicó Rijo, la embarcación se ha mantenido en funcionamiento.
“Lo que pasa es que muchas personas lo ven y piensan que no está funcionando, porque lo ven parado. Realmente es una embarcación estática, que trabaja paulatinamente. La basura, los residuos, las lilas vienen bajando desde el río Isabela hacia el Ozama, ese es el trayecto. Entonces lo que hace El Interceptor es interceptar esa basura, esos residuos que van bajando y los sube a través de una cadena, a unos contenedores, que después se llevan al puerto que se hizo en la Dirección de Dragas y se disponen en el vertedero de Duquesa”, explicó Rijo.
Bello expuso que un personal de la Armada lo opera técnicamente y está dividido en dos horarios e integrado por seis trabajadores.
Su puesta en marcha depende de una alianza que firmaron el Ministerio de la Presidencia, The Ocean Cleanup y el PNUD.
“Dijimos estos son de esos desafíos de desarrollo que son complejos, que no tienen una sola causa ni una sola solución y donde hasta la fecha lo que se había abordado no había sido suficiente. Dijimos si lo vamos a hacer tiene que ser por una alianza porque trasciende gobierno nacional, local, sector privado y sociedad civil, y la cooperación es un problema”, precisó María Eugenia Morales, oficial de Sostenibilidad y Resiliencia del PNUD en el encuentro con LISTÍN DIARIO.