Estados Unidos se convirtió este martes en el primer país del mundo en rebasar el millón de casos confirmados de COVID-19. Además la epidemia ya ha causado más víctimas mortales estadounidenses que la guerra de Vietnam: 58.365, frente a los 58.220 fallecidos que dejó el conflicto armado durante dos décadas hasta 1975.
Preguntado por esa cifra de un millón de afectados, el presidente Donald Trump ha tratado de relativizar:
“Hay que entender que hacemos más test que nadie. Podríamos ir a algunos de esos países, ya sabes, como Chin a, donde si haces pruebas, vas a encontrar muchos más casos“, afirmó.
Trump ordena que las plantas procesadoras de carne sigan abiertas, pese a ser un foco de contagio
Por otro lado, el mandatario ha firmado un decreto ordenando a las plantas procesadoras de carne que permanezcan abiertas para mantener el suministro de alimentos, después de que una veintena de ellas cerraran al convertirse en focos de contagio.
Entre las procesadoras cerradas se encuentran dos de las mayores plantas de cerdo del país, una de Tyson Foods en Iowa, con al menos 180 contagios, y otra de Smithfield en Dakota del Sur, con más de 500 casos confirmados.
El vicepresidente Mike Pence, sin mascarilla en la Clínica Mayo
La polémica en Estados Unidos esta vez ha venido de la mano del vicepresidente Mike Pence, que visitó la Clínica Mayo sin mascarilla haciendo caso omiso de la petición del hospital para que la portara. Pence se justificó diciendo que frecuentemente se hace pruebas de coronavirus y siempre han dado negativo.
En Nueva York, se ha rendido homenaje a los equipos sanitarios con un espectáculo aéreo. Las hospitalizaciones en el estado han caído por debajo de las mil diarias. Sin embargo, en el vecino estado de Nueva Jersey, el segundo más afectado, se ha registrado un récord de fallecidos con 402 muertos en 24 horas.