Cuando el Apolo 11 aterrizó en el Mar de la Tranquilidad el 20 de julio de 1969, fue más que un triunfo del espíritu humano, fue también la historia de una maravilla cibernética llamada la Computadora de Guía de Apolo (AGC), que ayudó a los astronautas del Apolo.
Navega con seguridad a la luna y regresa. Era una computadora tan avanzada para su época que los ingenieros que la crearon dijeron que probablemente no habrían intentado hacerlo si hubieran sabido en qué se estaban metiendo.
La computadora de guía Apollo es uno de los éxitos no reconocidos de la carrera espacial. Probablemente se deba a que tuvo un éxito tan extraordinario, ya que tuvo muy pocos problemas en vuelo, y la mayoría de ellos se debieron a un error humano.
Transportado tanto en el Módulo de Servicio de Mando (CSM) como en el Módulo Lunar (LM), realizó 15 misiones tripuladas, incluidos nueve vuelos de la Luna, seis aterrizajes lunares, tres misiones Skylab y la Misión de Prueba Apollo-Soyuz en 1975.
En ese momento era el último y más avanzado sistema de guía de vuelo por cable e inercial, la primera computadora de vuelo digital, la computadora en miniatura más avanzada hasta la fecha, la primera computadora en usar chips de silicio y la primera computadora a bordo en la que viven De la tripulación dependía de que funcionara como se anunciaba.
No es que la computadora de guía de Apolo fuera mucho para mirar. A primera vista, parecía una maleta de bronce en dos partes, con un total de 24 × 12.5 × 6.5 pulgadas (61 × 32 × 17 cm) y un peso de 70 lb (14 kg).
En el interior, ni siquiera es muy impresionante para los estándares de las computadoras modernas, ya que tiene tanta potencia como una bombilla inteligente con un total de aproximadamente 72 K de memoria y una velocidad de reloj de 12 microsegundos.
También es difícil hacer una comparación precisa con los dispositivos modernos porque el AGC no era una computadora de propósito general, sino que estaba literalmente programada para una tarea en particular, lo que le permitía funcionar al nivel del Commodore 64 o ZX Spectrum del principios de la década de 1980: intente imaginar llegar a la Luna utilizando un Commodore 64 para manejar la navegación y no comenzar a sudar frío.