Mientras el Poder Legislativo se partía en dos, porque los demócratas ganaban 14 escaños en la Cámara de Representantes en competencias claves y los republicanos retenían el control del Senado (con la posibilidad de incluso ampliar su mayoría), el mandatario aseguró que lo de esta noche fue un triunfo republicano.

Las competencias para las gobernaciones se mantenían igualmente divididas.  

Trump siguió los resultados de las elecciones de medio término en la Casa Blanca, acompañado por su familia y amigos. Según dijo Sarah Huckabee Sanders, la vocera de la presidencia, para el mandatario fue un “gran momento” cuando se enteró de Mike Braun había derrotado al demócrata Joe Donnelly en una de las peleas claves por el Senado, la banca de Indiana.

Aunque había dicho que no lo haría, el presidente felicitó por teléfono a la líder de la bancada demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, según confirmó el vicejefe de gabinete de la congresista, Drew Hammill. En la llamada, Trump reconoció la importancia de la apelación al trabajo bipartidario que Pelosi hizo en su discurso de victoria.

“Ahora mismo nos sentimos bien, ha sido una buena noche para el presidente hasta este momento”, dijo Sanders a los corresponsales.  “Cualquiera que esperara una ‘ola azul’ esta noche probablemente no la verá. Creo que eso es 100 % debido al liderazgo del presidente y a sus éxitos durante sus dos primeros años en el poder”, dijo Sanders sobre los comicios que renuevan 36 gobernadores, 33 senadores y la cámara baja