A nadie le gustan los condones: huelen mal, enturbian los placeres del sexo y alguien tiene que tirarlos después a escondidas a la basura. Las vasectomías tampoco son un plato apetecible para muchos:  en principio, ¿quién quiere tener a un cirujano, bisturí en mano, hurgándole en los genitales? Pero, ¿qué otras opciones tienen los hombres para protegerse contra el embarazo no planificado de su pareja?

“El 50 por ciento de la población mundial carece de un medio para gestionar adecuadamente sus deseos de salud reproductiva”, dice al respecto Hannah Vahdat, directora ejecutiva de la organización Male Anticonceptive Initiative (MCI). Esta situación pronto podría cambiar.  “Necesitamos diversos productos y se está trabajando en ellos”, explica Vahdat a DW. 

Dos tipos de contracepción masculina

Actualmente, se trabaja fundamentalmente en dos enfoques para impedir la concepción por parte del hombre. Uno es un método hormonal, que actúa de manera muy similar a la píldora femenina: se toma todos los días durante varios meses o años para brindar una anticoncepción duradera.

El otro es un medicamento de toma única, para ingerir justo antes del sexo, con el fin de proporcionar uns anticoncepción de corta duración. “Los productos hormonales son los que probablemente saldrán antes al mercado”, prevé Vahdat.

Método hormonal

Ambos métodos de control de natalidad funcionan impidiendo que se desarrollen los espermatozoides, lo que provoca una infertilidad temporal. La fertilidad vuelve a la normalidad cuando se deja de tomar el anticonceptivo.

Un ensayo clínico realizado en 2022 mostró que un gel hormonal tópico aplicado en el hombro de un hombre todos los días evitó con éxito que su pareja quedara embarazada. El gel contenía hormonas sintéticas, incluida la testosterona, que envía un mensaje al cerebro para inhibir la producción de esperma en los testículos.

El gel redujo significativamente la producción de esperma. El mecanismo fue reversible, ya que los niveles de esperma volvieron a la normalidad alrededor de 4 meses después de dejar de usar el producto. Al igual que la píldora femenina, los hombres necesitaron usar el gel constantemente para lograr un control eficaz de la natalidad.

Lo mismo pasa con la píldora. “Un hombre deberá tomar una píldora de hormonas todos los días de 7 a 10 semanas antes de que su conteo de espermatozoides sea lo suficientemente bajo como para que sea infértil. Luego, debe tomarla de forma continuada. Si cesa de ingerirla, la fertilidad tarda de 7 a 10 semanas en volver”, explica a DW Jochen Buck, profesor de farmacología en la Escuela de Ciencias Médicas Weill Cornell en los EE. UU.

El método no hormonal

Los anticonceptivos no hormonales actúan de manera similar. Pero, en lugar de alterar los niveles de hormonas, se dirigen a las moléculas específicas que desencadenan la producción de esperma.

Gosipol, una sustancia extraída de la planta de algodón, es uno de los fármacos no hormonales que provoca infertilidad en los hombres. Los ensayos muestran que el fármaco funciona, pero quizás demasiado bien, ya que, en los ensayos, ha demostrado carecer de reversibilidad en más del 20 por ciento de los sujetos.

Pero Buck y sus colegas trabajan en futuros fármacos más prometedores. “El esperma se produce en los testículos”, explica Buck. “Al eyacular, se mezcla con el líquido seminal, que contiene una señal para que los espermatozoides se muevan y busquen. Sin esto, nunca podrían salir de la vagina para fertilizar el óvulo”. Buck ha sido uno de los científicos que ha encontrado el interruptor que enciende esa señal: la adenilil ciclasa. Desde entonces, ha desarrollado un fármaco que inhibe la adenilil ciclasa.

Un tipo diferente de píldora para antes del sexo

En un estudio reciente publicado en la revista Nature Communications, un equipo de investigadores estadounidenses y alemanes, dirigido por Buck, probaron la eficacia del anticonceptivo. “Dimos una sola dosis del fármaco que bloquea la adenilil ciclasa a ratones macho, 30 minutos antes del apareamiento, y descubrimos que los dejaba infértiles durante varias horas”, dijo Buck, director del estudio.

En teoría, los hombres podrían tomar una sola dosis 30 minutos antes de tener relaciones sexuales, y sus efectos durarían toda una noche antes de que la fertilidad se reanude por la mañana. Pero, hasta ahora, este medicamento solo ha tenido éxito en animales.

¿Son seguros los anticonceptivos masculinos?

“Los métodos hormonales de los anticonceptivos masculinos tienen el riesgo de la administración de testosterona, por lo que hay efectos en el estado de ánimo, en la libido, aumento de peso, reducción del colesterol HDL (bueno) y sudoración nocturna”, dice John K. Amory, especialista en reproducción masculina de la Universidad de Washington, en Estados Unidos.

Según Amory, los hombres que usan anticonceptivos hormonales masculinos también podrían ser excluidos de los deportes que consideran como dopaje la administración de hormonas esteroides. 

Los efectos secundarios son, precisamente, lo que provoca retrasos en el desarrollo de anticonceptivos masculinos. Ha habido ensayos prometedores, detenidos antes de lo previsto luego de que los participantes informaran sobre efectos secundarios adversos. Algo de lo que tampoco están exentos los anticonceptivos femeninos.

En cuanto al medicamento no hormonal desarrollado por Buck, es demasiado pronto para hablar de efectos secundarios. Según su estudio, los ratones que recibieron esa píldora volvieron a ser fértiles unos días después, pero no se sabe si tiene otros posibles efectos secundarios, o cómo los hombres tolerarán el medicamento en los ensayos clínicos.