Corea del Norte disparó este lunes dos misiles balísticos de corto alcance, en respuesta a los entrenamientos aéreos que Estados Unidos y Corea del Sur realizaron el domingo. Las fuerzas armadas norcoreanas utilizaron su lanzador más moderno, que puede realizar un “ataque nuclear táctico” capaz de eliminar bases aéreas enemigas por entero, según afirmaron oficialmente.

La unidad de artillería de largo alcance del Ejército Popular de Corea en el frente occidental empleó un lanzacohetes múltiple de 600 milímetros hacia las aguas orientales, informó la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA).

Este tipo de sistema fue definido como “el último tipo en armas de ataque de precisión de lanzamiento múltiple” y “un medio de ataque nuclear táctico” asignado para destruir el aeródromo operativo enemigo, según el reporte.

La KCNA también aseguró que Estados Unidos y Corea del Sur ya han realizado simulacros aéreos combinados varias veces durante el corriente año, echando leña a las tensiones latentes en la península de Corea.

El lanzamiento de misiles del Ejército Popular de Corea tuvo lugar el mismo día en que un alto funcionario de Corea del Norte emitió una severa segunda advertencia en dos días.

Tras refutar contundentemente las sospechas de Corea del Sur sobre la preparación de las fuerzas de misiles de Corea del Norte, demostrada en el lanzamiento del sábado de un misil balístico intercontinental, Kim Yo Jong, subdirectora de departamento del Comité Central del Partido de los Trabajadores de la República Popular Democrática (RPDC), emitió un comunicado de prensa donde subrayó que el país “posee tecnología y capacidades satisfactorias”, según otra información del lunes de la KCNA.

El misil balístico intercontinental (ICBM) cayó en la zona económica exclusiva de Japón, según el gobierno del país.

Según sus informes anteriores, Corea del Norte lanzó el sábado un misil balístico intercontinental Hwasong-15 desde el Aeropuerto Internacional de Pyongyang hacia un área predeterminada en las aguas abiertas del este, un día antes de que Kim Yo Jong emitiera su primera declaración en casi un mes, acusando a Estados Unidos y Corea del Sur de “mostrar abiertamente su peligrosa codicia e intentar ganar ventaja militar y una posición predominante en la península de Corea”.

De acuerdo a lo que manifestaron autoridades japonesas, ese proyectil cayó en su zona económica exclusiva, lo que llevó a Washington y Seúl a realizar ejercicios aéreos conjuntos. El primer ministro japonés, Fumio Kishida, pidió una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, programada para el martes, para discutir las últimas acciones norcoreanas.

“Una seria provocación”

Las fuerzas armadas surcoreanas calificaron los lanzamientos como “una seria provocación que mina la paz y estabilidad de la península coreana y llamaron a Pyongyang a cesar “de inmediato”.

Pyongyang, en tanto, señaló que el Ejército Popular Coreano (EPC) realizó los disparos del lunes en respuesta a las maniobras conjuntas de Estados Unidos y Corea del Sur, y responsabilizó a esos países del deterioro de la situación de seguridad en la península coreana, según la agencia estatal KCNA.

“Con el ejercicio de disparo de hoy (lunes), que involucró lanzacohetes múltiples y supergrandes, medios de ataque nuclear táctico, el EPC demostró su plena capacidad de disuadir y responder” a los ejercicios aéreos conjuntos, agregó KCNA.

El misil balístico que se lanzó desde una ubicación no revelada en Corea del Norte, en una transmisión de KRT de Corea del Norte. Foto AP

El misil balístico que se lanzó desde una ubicación no revelada en Corea del Norte, en una transmisión de KRT de Corea del Norte. Foto AP

En tanto, la poderosa hermana del líder Kim Jong Un advirtió que su país monitorea de cerca las acciones de Washington y Seúl y amenazó con una “respuesta correspondiente” a las maniobras aéreas conjuntas.

“La frecuencia del uso del Pacífico como nuestro campo de tiro depende de las acciones de las fuerzas estadounidenses”, advirtió Kim Yo Jong en el comunicado divulgado por la agencia estatal KCNA.

Corea del Sur y Estados Unidos se preparan para llevar a cabo un ejercicio, la próxima semana en Washington, para saber qué medidas tomar si Pyongyang utiliza armas nucleares.

Esto provocó la ira de Corea del Norte, que amenazó el viernes con una respuesta “sin precedentes” a lo que calificó de preparativos de guerra.

Con información de agencias.