Nuevas restricciones para contener la pandemia en Francia. El país supera los 86.000 muertos y mantiene el número de contagios diarios por encima de los 25.000. La ciudad de Dunkerque, en el departamento Norte, han impuesto un confinamiento domiciliario este fin de semana.
“Venimos a hacer la compra el sábado por la mañana y después volvemos a casa para ya no salir más!”, dice esta mujer.
Las mismas restricciones se aplican en Niza, en el departamento de Alpes Marítimos. Salidas de máximo una hora y en un radio de 5 km. Y con los accesos a la playa cerrados durante dos semanas.
El Gobierno, además, ha puesto en “vigilancia reforzada” una veintena de departamentos en los que vive casi el 40 % de la población francesa, incluidos los de la región de París.
Polonia también ha impuesto medidas estrictas ante el alarmante aumento de casos en la provincia de Warminsko-Mazurskie (en el norte de Polonia), restricciones que estarán en vigor hasta el 14 de marzo.
“Ya estamos acostumbrados y francamente me alegro de que estas restricciones estén vigentes, yo mismo lo pasé mal con la COVID -19, me molesta cuando la gente ignora la pandemia y va con la mascarilla bajada o con una bufanda enrollada en la cara.”, decía este polaco.
Además de las escuelas, permanecen cerrados los hoteles, centros comerciales, cines, teatros, museos, e instalaciones deportivas de todo el país.