Víctor Alexander Portorreal (Chamán Chacra) rompió el silencio en el que se mantuvo durante los once meses que duró su caso en los tribunales. Se declaró culpable de haber asesinado a su pareja Reyna Isabel Encarnación y a los tres hijos de esta.
Momentos después las juezas Gisselle Méndez, Tania Yunes y Jissel Naranjo dieron su veredicto. Lo sentenciaron a 30 años de cárcel por asesinato, incesto y violación sexual y lo mandaron a cumplir la condena en la cárcel de San Pedro de Macorís.
Durante su declaración, Chamán se expresó con una voz pausada, y sentado en el banquillo de los acusados, pidió perdón tanto a la familia de las víctimas como a la sociedad por el cuádruple asesinato, pero dentro de su breve testimonio tomó un momento para aclarar que no todo lo que se ha dicho es cierto.
“Yo acepto los hechos, y no todo lo que se dijo pasó de esa manera. Entiendo que no puedo devolver el tiempo para poder recuperar las vidas que yo quité. Pido a la sociedad y a todos los familiares, perdón por lo que ocurrió. Facilité mi arresto porque entendí que quitándome la vida no tenía forma de pagar lo que yo hice”, expresó calmado Víctor Portorreal en el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional.