SANTIAGO. El suministro de agua potable en esta ciudad sigue confrontando serias dificultades, mientras prosiguen descendiendo los niveles de la presa de Tavera, lo que ha obligado a las autoridades del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) prohibir nuevas siembras agrícolas aquí y en la Línea Noroeste.
Marino Abreu, encargado regional norte del INDRHI, informó que el nivel de la presa de Tavera se colocó ayer en 315.88 centímetros sobre el nivel del mar y que estaban entrando 28 metros cúbicos y sacando 18.
“Estamos supliendo agua para cubrir las demandas del sector energético y de los productores, agrícolas de varios rubros y en el caso específico del canal Ulises Francisco Espaillat, teníamos 85 mil tareas de arroz, de las cuales se sacaron 35 mil”, subrayó Abreu.
Mientras que desde la oficina de relaciones de relaciones públicas de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de esta ciudad (CORAASAN), se informó que se produjo una ligera mejoría en los ultimos días luego de reparar una de las bombas que estaban averiadas y limpiar las rejillas en la presa.
Darío Fernández, vocero de la empresa acuífera, indicó que actualmente se procesan 106 millones de galones diarios, pero la deman- da supera los 120 millones por día.
Para operar en óptimas condiciones la presa de Tavera requiere de un nivel máximo de 327.50 metros cúbicos sobre el nivel del mar.
Actualmente CORAASAN construye un acueducto en la comunidad de Cienfuegos, en la zona oeste, con lo cual contempla resolver en gran medida la deficiencia en el suministro de agua potable en esta ciudad.
Asimismo, construye varios tanques para almacenamiento del líquido, en las zonas de Gurabo y en la parte sur de Santiago.
La presa de Tavera está ubicada al sur de la provincia de Santiago y colinda con los municipios de Moca, Baitoa y La Vega. Su construcción se inició en el año 1969 y fue inaugurada por el entonces presidente Joaquín Balaguer el 27 de febrero de 1973.