SpaceX, la compañía aeroespacial fundada por el multimillonario Elon Musk, planea el lanzamiento de 60 satélites Starlink a órbita para comenzar el despliegue de una ambiciosa constelación que ofrezca conexión de banda ancha en todo el mundo. El lanzamiento, que estaba previsto este jueves a las 4:30 de la mañana (hora peninsular española), ha sido pospuesto para la misma hora de este viernes.

Los satélites están apilados en la carga de un único cohete Falcon 9, que despegará de la Estación de la Fuerza Aérea de Cabo Cañaveral, en Florida, si las condiciones climáticas lo permiten. El lanzamiento se podrá seguir desde laretransmisión de SpaceX.

En 2018, un cohete Falcon 9 puso en órbita dos satélites, denominados Tintin-A y Tintin-B. Pero esa pareja eran una simple prueba; estos 60 satélites son diseños de producción, dijo Musk a través de Twitter. Desplegar constelaciones de cientos, e incluso miles, de satélites para dar conexión en cualquier parte del globo terráqueo es un gran atractivo para varias compañías e inversores, que ven en estos proyectos el siguiente paso en conectividad. No obstante, llevarlos a cabo supondrá una gran inversión de dinero y tiempo.

Musk afirmó que, a diferencia de otros sistemas similares, la latencia será lo suficientemente baja (25 milisegundos) como para que el servicio pueda ser usado en videojuegos en línea, algo que el internet por satélite que se puede contratar en la actualidad no puede ofrecer. Usando una terminal de tierra, los clientes podrían conectarse desde prácticamente cualquier lugar del mundo.