MADRID
España batió en 2017 todos los récords de peticiones de asilo con 31,120 solicitudes, más del doble que las contabilizadas el año anterior, sobre todo debido al aumento de las procedentes de venezolanos, que se triplicaron.
Según informó el jueves la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), también hubo un aumento de solicitudes de colombianos, así como un incremento de peticiones realizadas en el puesto fronterizo del aeropuerto de Madrid, sobre todo pro parte de palestinos.
España recibió 10,350 solicitudes de ciudadanos venezolanos, más del doble que los sirios (4,225), a los que siguieron los colombianos (2,460), ucranianos (2,265), palestinos y argelinos (ambos con 1,165), salvadoreños (1120), hondureños (970), cameruneses (750) y marroquíes (525).
Sin embargo, de las más de 31,000 peticiones, solo resolvió 13,350, de las que dos tercios fueron rechazadas, según denunció la ONG, con datos recopilados de Eurostat, la oficina estadística de la Unión Europea.
La mayoría de denegaciones fueron para personas procedentes de Ucrania (3,025), seguida de Venezuela (1,530) y Argelia (1,035).
Los datos sitúan a España como el país donde más se incrementaron las peticiones de asilo, si bien apenas supone un 4 % del total que recibió la Unión Europea, y está muy lejos de otros como Alemania (222,560), Italia (128,850) o Francia (98,635).
España acumula 38,880 solicitudes pendientes de resolver; de ellas, una de cada tres (13,425) proceden de Venezuela, 4,095 de Ucrania, 2,895 de Colombia y 2,460 de Siria.
Un “colapso” que conlleva que casi 40,000 personas vivan “en este momento en la incertidumbre de no saber si podrán quedarse en España o tendrán que volver a los países de los que huyeron, con el riesgo que eso supone”, denunció la secretaria general de CEAR, Estrella Galán.