El multimillonario príncipe saudí y una de las personas más ricas del mundo, Alwaleed bin Talal, ha sido liberado este sábado, dos meses después de haber sido detenido en una operación anticorrupciónpuesta en macha por el gobierno de Arabia Saudí.
Según han explicado los familiares a la agencia Reuters, el príncipe Alwaleed ha salido ya del hotel Ritz-Carlton de Riad, donde se encontraba retenido, tras haber alcanzado un acuerdo financiero con el fiscal general del Estado del que se desconocen los términos .
Las autoridades saudíes esperan recaudar unos 100.000 millones de dólares para las arcas del Estado
En noviembre de 2017, el multimillonario, junto con más de medio centenar de personas -entre las que se encontraban otros príncipes, ministros y hombres de negocio-, fueron acusados de corrupción en el marco de una campaña impulsada por el rey saudí Salman para reformar la superpotencia petrolera del país y consolidar su poder.
Ahora, la ley parece haberse suavizado, ya que a pesar de que entre las acusaciones contra el magnate se incluían blanqueo de dinero, soborno y extorsión de funcionarios, el príncipe ha sido puesto en libertad sin cargos.
Con las detenciones y los posteriores acuerdos, las autoridades saudíes han dicho que esperan recaudar unos 100.000 millones de dólares para las arcas del Estado, lo que supone una gran entrada de ingresos inesperada para un país cuyas finanzas han menguado con la caída del precio del petróleo.
La importancia de esta liberación, se encuentra también en la gran fortuna que el príncipe inversor lleva amasando durante años. Su arresto agitó considerablente los mercados. Las caídas provocadas por la noticia en la bolsa saudí afectaron a todos los valores en los que el príncipe tiene participaciones.