Estados Unidos ha roto récords en cuanto al volumen de votos por anticipado cuando quedan dos semanas para las elecciones , con más de 35 millones de sufragios ya emitidos, aunque en algunos estados crece la preocupación sobre posibles problemas en el trámite de las papeletas por correo.

Catorce días antes de la fecha oficial para elegir entre el presidente Donald Trump y el candidato demócrata, Joe Biden, ya se ha alcanzado el 70 % del volumen total de votos por anticipado que se emitieron en las elecciones de 2016, según un análisis publicado este martes por el diario The Washington Post.

Más de 35 millones de estadounidenses han emitido su voto con antelación a los comicios del 3 de noviembre, según datos actualizados este martes por el independiente Proyecto de las Elecciones en EE.UU., mientras que en las mismas fechas hace cuatro años, habían votado menos de 6 millones.

Los datos han dado esperanzas a los demócratas mientras la campaña de Trump asegura que sus seguidores prefieren votar el día de las elecciones

Las papeletas emitidas hasta ahora por adelantado suponen además el 25 % de los 136 millones de votos que se contaron en total en las elecciones de 2016, cuando Trump se impuso a la demócrata Hillary Clinton.

Los datos han dado esperanzas a los demócratas, porque los votantes registrados como fieles a ese partido están votando mucho más que los republicanos en aquellos estados que proporcionan información sobre las preferencias políticas de sus votantes, como Florida, Carolina del Norte o Pensilvania.

Además, muchos de los que han votado por adelantado son mujeres o negros, dos perfiles que tienden a respaldar más a los demócratas, de acuerdo con datos estatales revisados por el Post. Sin embargo, la campaña de Trump asegura que sus seguidores prefieren votar el día de las elecciones, y aquellos que se identifican como republicanos suelen afirmar en las encuestas que planean ejercer su derecho en persona, y no por correo.

En efecto, aunque el 53 % de quienes han votado por anticipado en una veintena de estados del país son demócratas y solo el 25 % son republicanos; la diferencia se estrecha al fijarse solo en los que han ejercido ese derecho en persona: el 43 % son progresistas y el 36 % conservadores, según el Proyecto de las Elecciones en EE.UU.

La complejidad del voto por correo

Las posibilidades de votar por correo se han ampliado este año debido a la pandemia, y doce estados envían automáticamente solicitudes de voto postal a los hogares de todos los votantes registrados -entre ellos territorios clave como Arizona u Ohio- mientras que en otros diez se les mandan directamente las papeletas.

Sin embargo, en algunos estados, como los cruciales de Pensilvania y Michigan, está prohibido empezar a procesar los votos emitidos por adelantado hasta el propio día de las elecciones, lo que apunta a un probable largo retraso en el recuento de esas papeletas, que en su mayoría se espera que vayan para Biden.

FILE In this Thursday, Sept. 3, 2020 file photo, a load of absentee ballots are loaded onto a truck for mailing at the Wake County Board of Elections as preparation for the upcoming election are ongoing in Raleigh, N.C. Time was dwindling for thousands of North Carolina voters to fix absentee voting errors as elections officials hustled out an updated process for handling mail-in ballot problems two weeks before Election Day. (AP Photo/Gerry Broome, File)
FILE In this Thursday, Sept. 3, 2020 file photo, a load of absentee ballots are loaded onto a truck for mailing at the Wake County Board of Elections as preparation for the upcoming election are ongoing in Raleigh, N.C. Time was dwindling for thousands of North Carolina voters to fix absentee voting errors as elections officials hustled out an updated process for handling mail-in ballot problems two weeks before Election Day. (AP Photo/Gerry Broome, File) (Gerry Broome / AP)

Si esos votos acaban inclinando esos estados a favor del demócrata cuando en la noche electoral pareciera que iban a engrosar la columna de Trump, muchos observadores temen que el presidente pueda no reconocer ese resultado, lo que en un escenario extremo podría derivar en una crisis constitucional.

Pero, además, los retrasos en la entrega de cartas y paquetes por correo han generado preocupación en al menos diez estados clave, donde el servicio de paquetería de primera clase va el 7,8 % más lento que en enero, según datos del Servicio Postal revisados este martes por The Washington Post.

Esos retrasos se deben en parte a los recortes que los dirigentes del Servicio Postal nominados por Trump empezaron a implementar este verano, aunque finalmente dieron marcha atrás ante la fuerte polémica generada en el país.

Las perturbaciones en el servicio postal pueden tener un impacto decisivo, ya que estados clave como Michigan, Wisconsin y Georgia no aceptarán papeletas que lleguen después del 3 de noviembre, incluso si su sello postal es anterior a esa fecha, mientras que en Carolina del Norte no se tramitarán votos recibidos después del día 6.

Trump va a Pensilvania, Biden prepara el debate

Biden, que mantiene su ventaja de unos 10 puntos sobre Trump a nivel nacional pero está empatado en las encuestas de estados clave como Ohio o Carolina del Norte, no hizo campaña este martes por segundo día consecutivo, y se dedicó a preparar el último debate que le enfrentará este jueves al mandatario.

El exvicepresidente espera dar un impulso a su campaña con la entrada en la contienda del expresidente Barack Obama, que este miércoles dará su primer mitin, un acto en Filadelfia (Pensilvania) que el público seguirá desde sus vehículos debido a la pandemia.

Mientras, Trump viajó este martes al condado clave de Erie en Pensilvania, uno de los distritos del país que solían votar por el expresidente Barack Obama y que en 2016 le respaldaron a él, aunque por un margen muy estrecho que ahora está en duda.

Antes de viajar, Trump grabó una entrevista en la Casa Blanca que emitirá el domingo la cadena CBS News, pero el presidente cortó abruptamente el encuentro y luego publicó en su cuenta de Twitter un vídeo de la presentadora del programa, a la que criticó por no llevar mascarilla pese a que muchos de sus asesores hacen lo mismo.