Una antigua base naval ártica de los tiempos de la Guerra Fría situada en las afueras de Tromso (Noruega) pronto podría albergar submarinos nucleares de Estados Unidos, informa la Corporación de radiodifusión estatal noruega (NRK).
La base Olavsvern fue clausurada en 2009 después de que Oslo considerara que ya no cumplía su propósito debido a que las relaciones con Rusia habían mejorado y las tensiones eran menores que durante el antiguo conflicto entre EE.UU y la URSS.
A raíz de la presión de la Marina estadounidense, esta semana podría estar listo un acuerdo sobre la reapertura de Olavsvern a través de un contrato de arrendamiento.
Reunión “al más alto nivel”
De hecho, oficiales de alto rango del país norteamericano han visitado dicha base varias veces. Asimismo, el pasado 9 de octubre tuvo lugar una reunión “al más alto nivel” en el Ministerio de Defensa noruego en la que se aprobó un pacto que permite a los militares noruegos y, por ende, a sus países aliados —incluido EE.UU.— utilizar las instalaciones.
En 2013, la compañía Olavsvern Group compró la base y otra empresa, llamada WilNor, tiene un acuerdo de opción para hacerse cargo de dos terceras partes de la firma propietaria a partir de año nuevo. Es precisamente WilNor —que colabora con el Ejército de Noruega— la que estaría negociando para que las Fuerzas Armadas vuelvan nuevamente a Olavsvern.
Frank Bakke-Jensen, ministro de Defensa noruego, explicó que existe un acuerdo para que buques propulsados por reactores nucleares puedan utilizar el puerto de Grotsund, localidad situada al norte de Tromso, detallando que dicha decisión “se tomó después de consultar a las autoridades estadounidenses”.
Municipio vecino en contra
Un avanzado submarino nuclear de ataque de EE.UU. pierde su revestimiento en su primera misión
A pesar de que la mayoría en el consejo municipal de Tromso se ha opuesto a que EE.UU. utilice el muelle de Grotsundet para sus submarinos nucleares, Bakke-Jensen dijo que el Gobierno tiene derecho a invalidar el municipio en un caso como este, asegurando que la llegada de buques norteamericanos a la zona no empeorará las relaciones con la vecina Rusia.
De acuerdo con el medio, la Marina estadounidense quiere tener acceso a Olavsvern y al muelle de Grotsundet sobre todo porque este último hace posible que un submarino de ataque se haga a la mar rápidamente en caso de que surja una