Cancelada y luego abierta en Internet. Art París finalmente se llevó a cabo en el mundo real: la primera gran exposición de arte en vivo en seis pandémicos meses.
Asistieron cerca de 57.000 visitantes, con obras de unos 900 artistas.
Su director, GUILLAUME PIENS, explica un marco poco tranquilizador para la cultura:“Las galerías están muy preocupadas, no han visto coleccionistas, no han vendido, es un período muy angustioso … Creo que aquí en cualquier caso los galeristas han estado ilusionados y llenos de esperanza de poder finalmente exponer obra de los artistas y venderlas”.
Las restricciones a los viajes internacionales también han cobrado su precio, lo que dificulta las ventas en el extranjero.
GAËL CHARBAU, marchante independiente asegura que_”Los más frágiles, más debilitados de este ecosistema son los artistas más jóvenes, porque necesitan tener un reconocimiento fuera de la escena francesa”._
Para apoyar a estos artistas noveles y nuevas galerías, Art Paris creó un espacio llamado Promesas, donde 14 galerías exhibían pinturas y esculturas.
La artista venezolano-brasileña Rosa Maria Unda Souki estuvo entre ellos. Gran parte de su trabajo se centra en la vida diaria y en el hogar. Cada obra de la serie muestra un estado de ánimo diferente, desde el amor hasta la tristeza. El último cuadro iba a ser inicialmente sobre diversión, pero acabó en humor negro y confinamiento: “Veo el baño no como un espacio ordinario, sino como un espacio particular donde podemos relajarnos cuando estamos muy solos, pero en una situación segura, donde podemos afrontar nuestras emociones. Quería hablar sobre la alegría, el placer del agua … pero fue en el confinamiento cuando lo pinté así que pensé más en el humor, en la forma de reirnos de nuestra tragedia, de nuestro drama”.
Aunque Art París es una feria de arte, donde el objetivo es vender, se parece más a una exposición que a algunos certámenes, con un fuerte marchamo comercial.
Charbau encuentra “que de alguna manera hemos dejado la orilla de un arte demasiado conceptual, o muy conceptual basado en ideas, para volver a formas que están muy ancladas en el material, en la imagen, en la figuración”.
Uno de los focos de la feria fue la escena francesa y sus ‘historias únicas y universales’, mientras que el otro tema principal fue la península ibérica, España y Portugal a partir de los años 50 con visitantes como, el ex primer ministro francés Manuel Valls, actual concejal del ayuntamiento de Barcelona, para ver la obra de su padre: “Mi padre fue un gran artista español, figurativo que trabajó principalmente en París …lienzos de gran suavidad, mucha luz, mucha meticulosidad y eso da mucha poesía”.