Como manda la tradición británica cada segundo sábado de junio, la reina Isabel II ha celebrado su fiesta de cumpleaños, en pleno confinamiento por el coronavirus.
En esta ocasión ha sido un acto discreto, en el castillo de Windsor en donde ha recibido el saludo real, con los soldados formados guardando la preceptiva distancia social.
Aunque nació un 21 de abril hace ahora 94 años, la ceremonia oficial siempre tiene lugar con el vistoso desfile militar Trooping the Colour que inunda las calles de Londres de miles de turistas.
Es la segunda vez en sus casi setenta años de reinado que el desfile se suspende. La primera fue en 1955 durante una huelga nacional de los ferrocarriles británicos.
Buckingham Palace ha distribuido unas imágenes de estos días con la reina Isabel II participando en una reunión por videoconferencia con cuatro representantes de una oenegé fundada por su hija, la princesa Ana.
Se trata de la asociación Carers Trust dedicada al apoyo de las personas encargadas del cuidado de familiares gravemente enfermos o discapacitados.