El centro histórico de Quito, la capital ecuatoriana, se ha vuelto a transformar en un caótico campo de batalla. La gran marcha indígena, que recorrió este miércoles la ciudad, en una jornada de paro nacional contra el gobierno de Lenín Moreno, dio paso por la tarde a violentos choques y cargas policiales.
Las movilizaciones, que comenzaron hace una semana, ya han dejado al menos cuatro muertos y unos 800 detenidos. Los manifestantes piden que se vaya el presidente.
“Vamos a luchar hasta que se vaya este hombre que no sirve para nada. No somos cuatro correístas, sino todo el Ecuador”, asegura un manifestante.
Lenín Moreno tiende la mano a los indígenas
Tras la gran marcha de este miércoles, Lenín Moreno ha cambiado de estrategia y abierto un diálogo con los indígenas, a los que promete implementar una serie de medidas para compensarles por la eliminación de los subsidios a los combustibles, la polémica medida que disparó su precio y provocó esta crisis.
El presidente también ha anunciado que regresa a Quito desde Guayaquil, a donde trasladó su gobierno ante la llegada masiva de indígenas a la capital.
Gran marcha blanca en Guayaquil a favor de la paz
Precisamente en esta ciudad costera ha tenido lugar una gran marcha blanca alternativa, a favor de la paz y contra las protestas de los indígenas y otros sectores que convulsionan el país.