Imagínense que la red telefónica dejase de funcionar en grandes zonas del mundo o funcionase con graves problemas. Parece el guión de una distopía, pero lo cierto es que servicios de alcance casi global como WhatsApp, que es en gran medida un sustituto del teléfono, sufren fallos con cierta frecuencia. ¿A que se deben esta clase de problemas?
Las causas son diversas, pero parece que la expansión mundial de ciertas herramientas y el gran número de usuarios que las usan, pueden ser motivos importantes en este problema. Sobre todo por su complejidad tecnológica. Tengamos en cuenta que en el caso de algunos de servicios de Internet su número de usuarios se cuenta por cientos o incluso por miles de millones de personas.
Imagínense que la red telefónica dejase de funcionar en grandes zonas del mundo o funcionase con graves problemas. Parece el guión de una distopía, pero lo cierto es que servicios de alcance casi global como WhatsApp, que es en gran medida un sustituto del teléfono, sufren fallos con cierta frecuencia. ¿A que se deben esta clase de problemas?
Las causas son diversas, pero parece que la expansión mundial de ciertas herramientas y el gran número de usuarios que las usan, pueden ser motivos importantes en este problema. Sobre todo por su complejidad tecnológica. Tengamos en cuenta que en el caso de algunos de servicios de Internet su número de usuarios se cuenta por cientos o incluso por miles de millones de personas.
Algunos de los servicios que han fallado tienen un número de usuarios que se cuenta por cientos o incluso miles de millones de personas
Eso es todo un reto incluso para una empresa enorme, como Facebook. Propietaria de Instagram y WhatsApp. A pesar de su magnitud Facebook no suele dar información de los motivos que provocan los fallos en sus servicios. Simplemente pide disculpas, como hizo en Twitter el pasado tres de julio cuando dejaron de cargarse imágenes en sus aplicaciones.
Esto lleva a especular sobre los motivos hay detrás de las interrupciones de las aplicaciones propiedad de Facebook. No es descabellado pensar que Zuckerberg puede estar planeando la anunciada integración de su red social principal con Instagram y WhatsApp. Eso explicaría que se tengan que acometer cambios técnicos de calado que de vez en cuando producirían fallos.