Según Sandra Ramos hay “desde bolsas de plástico, tapas de botellas, fibras… Las corrientes de los ríos, los vientos o los rayos ultravioleta han ido degradando sus partículas más pequeñas.
“Las larvas de peces pueden asumir que los microplásticos son alimentos y pueden tener un bloqueo intestinal que les cause la muerte. Por otro lado, después de comer demasiado plástico tendrán el estómago lleno de plástico y no de comida, entonces morirán. ”
Según Sandra Ramos, el estudio también mostró que la concentración de las partículas plásticas es más “abundante en la zona media” y durante la época de lluvias, cuando el caudal del río es mayor, lo que revela que la “fuente de contaminación se origina aguas arriba en España.