El blanqueo de la piel es una industria de 1000 millones de dólares en países de población predominantemente negra, pero algunos gobiernos quieren cambiar esta situación.
El de Ruanda es uno de ellos. Tras denunciar los efectos dañinos a la salud que provocan los químicos, el país ha comenzado a tomar medidas enérgicas para lograr la prohibición de los agentes blanqueadores que se encuentran en los cosméticos, en especial la hidroquinona y el mercurio.
“Hemos llevado a cabo inspecciones en cosméticos para garantizar que no contengan hidroquinona ni mercurio”, mencionó el miércoles Simeon Kwizera, un vocero de la Rwanda Standards Board (Oficina Normativa de Ruanda), durante una entrevista telefónica el 9 de enero. “Estamos incautando algunos cosméticos, inspeccionando las tiendas y los mercados, y asesorando a los vendedores”.
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En Ruanda y otros países, la gente usa cosméticos para blanquearse la piel porque siente que una piel más clara es el ideal o indica un estatus social más alto. Las personas de piel oscura normalmente no aparecen en vallas publicitarias, películas y anuncios, y las celebridades de piel oscura a veces se vuelven más populares después de blanquearse la piel.
Todo esto contribuye a la percepción de que la piel oscura es de menor valor o no se considera tan hermosa como la piel clara.
La industria de la decoloración de la piel no solo es impulsada por la demanda de los países africanos, sino también por naciones como India, China, Corea del Sur y muchas naciones caribeñas.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el 61 por ciento del mercado dermatológico en India consiste en productos para aclarar la piel. En Nigeria el 77 por ciento de las mujeres usa productos para aclarar la piel con regularidad y en Sudáfrica es el 59 por ciento, según el organismo internacional de salud.
Quienes usan estos productos suelen estar expuestos a la hidroquinona y al mercurio, dos ingredientes que son los principales componentes de la mayoría de los productos para aclarar la piel y que interrumpen o suprimen la producción de melanina, comentó Carlos Charles, dermatólogo y fundador de Derma di Colore, una clínica en Nueva York.
De los dos ingredientes, el mercurio es el más peligroso. Puede causar daño renal y también se sabe que provoca sarpullidos, problemas de cicatrización, ansiedad, depresión, psicosis y neuropatía periférica, así como la reducción de la resistencia de la piel a infecciones bacterianas o micóticas, de acuerdo con la OMS.
En lo que respecta a la hidroquinona, “puede haber problemas cuando se usa en una concentración muy alta”, explicó Charles. “Puede provocar sarpullido. Algo más grave es que, si se usa en una concentración alta durante un periodo prolongado, puede causar ocronosis, un padecimiento que paradójicamente puede oscurecer la piel”.
Algunos países han prohibido todas las cremas blanqueadoras de la piel, o el uso de mercurio e hidroquinona en ellas.
En 1983, Sudáfrica prohibió todas las cremas que tuvieran más de dos por ciento de hidroquinona. En 2015, Costa de Marfil prohibió todas las cremas blanqueadoras y, en 2016, Ghana empezó una prohibición de ciertos productos blanqueadores que contienen hidroquinona. Ruanda instituyó su prohibición en 2013, pero no la hizo cumplir de una manera estricta sino hasta noviembre, cuando comenzaron las medidas enérgicas del gobierno.
Para sortear estas prohibiciones, algunos fabricantes de cosméticos, con la mira puesta en las oportunidades de generar ganancias, cambian el nombre de los agentes para poder vender sus productos, según Kwizera.
“Algunos fabricantes engañan a los clientes”, afirmó, creando varias marcas falsas, por ejemplo. “Crean más de 80 nombres solo para cambiar el nombre”.
Kwizera cree que el contrabando es el principal método para ingresar los productos con hidroquinona a Ruanda.
El presidente del país, Paul Kagame, respaldó las medidas severas contra los agentes blanqueadores en Twitter, donde dijo que el blanqueamiento de la piel es dañino para la salud.