El vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Jiménez Bichara, reafirmó ayer aquí que la central termoeléctrica Punta Catalina entra en funcionamiento entre enero y febrero del próximo año.
“La planta debe de estar operando con cierto grado de normalidad en enero. Para esa fecha debe estar cerca de los 200 megavatios en línea”, sostuvo.
El funcionario dijo que para diciembre próximo se estarían sincronizando todos los componentes del sistema energético de la termo electrito.
Indicó que el carbón que será utilizado para realizar esas pruebas llegará al país la semana entrante.
Jiménez Bichara ofreció esos detalles previo a su participación en el encuentro almuerzo de la Cámara Americana de Comercio, capítulo Santiago, realizado en el hotel Gran Almirante, de esta ciudad.
Durante la actividad, el vicepresidente ejecutivo de la CDEEE dictó la conferencia “Punta Catalina: Impacto de su entrada en el sistema energético nacional”.
Expresó que una vez Punta Catalina entre en operación impactará positivamente en todas las áreas donde el sistema eléctrico dominicano presenta debilidades.
Dijo que tanto el sector productivo nacional como la población en general aspiran a un sistema eléctrico suficiente para abastecer la demanda de energía, eficiente para evitar fallas en la calidad de la electricidad servida y a precios razonables para garantizar la competitividad.
“Esos tres elementos serán tocados positivamente y de manera directa por la planta de Punta Catalina cuando entre en operación con sus 752 megavatios brutos a partir del próximo año”, expresó Jiménez.
Señaló que uno de los principales problemas del sector eléctrico es el de las altas pérdidas de distribución, que rondan el 28.5 por ciento, “pero con la entrada de Punta Catalina, a un precio promedio de ocho centavos de dólar el kilovatio/hora, es seguro que los costos se reducirán y bajarán las pérdidas de las empresas EdeNorte, EdeSur y EdeEste”.
Sostuvo que con la baja de las pérdidas el Gobierno podrá reducir los costos de energía. En ese sentido, explicó que al esa planta ser de carbón mineral y representar alrededor de un tercio de la oferta eléctrica nacional, desplazará del sistema a las plantas que actualmente operan con fuel oil como combustible derivado del petróleo, el cual es el más costoso del mercado.
A su juicio, los generadores privados que tienen plantas de fuel oil se verán motivados a realizar inversiones para convertir sus unidades a gas natural para reducir sus costos.
Jiménez Bichara detalló que la inversión contractual de Punta Catalina es de US$1,945 millones, con un aporte adicional de un fondo de contingencia de US$336 millones condicionado a los resultados de un proceso de arbitraje que se desarrollará en la ciudad de New York.
Indicó que en la actualidad el proceso de construcción de Punta Catalina está en un 97 por ciento.
A la actividad asistieron empresarios locales y nacionales, como también autoridades civiles y militares de esta ciudad.
Las palabras de bienvenidas las pronunció Carlos Iglesias, miembro del Comité provincial de Santiago de la Cámara Americana de Comercio. Mientras que el discurso de orden estuvo a cargo del director provincial de la entidad, Ricardo de la Rocha.
La central termoeléctrica Punta Catalina se construye en la provincia Peravia, en la parte sur del país. Durante su intervención, tras agradecer a Rubén Jiménez Bichara por aceptar la invitación, Ricardo De la Rocha Expresó la necesidad de contar con un siniestro de energía confiable y a precios competitivos, para poder atraer inversiones y desarrollar industrias sofisticadas con tecnologías e ingenierías de punta. “Es imprescindible contar con un suministro eléctrico de la más alta confiabilidad”, expresó el director del capítulo provincial.