El Departamento de Defensa de EE.UU. ha suspendido temporalmente las operaciones de vuelo de toda su flota de aviones F-35 después de que el mes pasado un avión de este tipo se estrellara en Carolina del Sur.
La decisión del Pentágono tiene el objetivo de permitir “una inspección de un tubo de combustible dentro del motor de todas las aeronaves F-35”. El F-35 es el sistema de armas más costoso de EE.UU., reporta Bloomberg.
La inspección se produce a causa de los datos iniciales generados en la investigación del accidente que sufrió un avión F-35B cerca de la ciudad de Beaufort, en Carolina del Sur, el 28 de septiembre.
Se prevé que las inspecciones terminen en las próximas 24 o 48 horas, ha detallado un representante del Pentágono.
Actualmente, más de 320 cazas F-35 operan en una quincena de bases en todo el mundo, aunque el Pentágono y el fabricante Lockheed Martin siguen intentando resolver más de 900 deficiencias, incluidos fallos en el ‘software’ de la aeronave, informa la agencia.