Israel, el país modelo en el combate a la pandemia, con un plan de vacunación que rompió todos los récords planetarios, vuelve a enfrentar a coronavirus con un aumento de la tasa de positividad del 3,78%, a pesar de algunas medidas de contención adoptadas por el gobierno en los últimos días.

El lunes, hubo 3.818 nuevos contagios (casi el doble que hace una semana). La cantidad de enfermos se elevó a 22.345 y de ellos, 221 se consideran graves.

Si bien los fondos del seguro de salud informan una reacción muy positiva de los mayores de 60 años a la oferta de recibir una tercera dosis de la vacuna Pfizer (según los medios, los inscriptos están en el orden de decenas de miles), la campaña principal no despega y el gobierno insiste para convencer a más de un millón de israelíes mayores de 12 añosde que se inmunicen con las dos primeras dosis.

La meta del Gobierno israelí es que en torno a un millón y medio de ciudadanos que superan los 60 años se vacunen la próxima semana.

Una mujer recibe la tercera dosis de la vacuna de Pfizer en Israel. Foto: Dpa

Una mujer recibe la tercera dosis de la vacuna de Pfizer en Israel. Foto: Dpa

Se trata también del primer Estado del mundo que inyecta una tercera dosis de la vacuna de Pfizer, una medida recomendada por la farmacéutica que ha generado debate a nivel mundial, y que aún no ha sido aprobada por las autoridades sanitarias de EE.UU. o la UE.

El problema de las vacaciones

El lunes solo hubo 6.000 vacunaciones. En esta etapa, las preocupaciones inmediatas del gobierno se refieren al regreso de decenas de miles de israelíes de las vacaciones en el extranjero, la apertura en un mes del año escolar y las celebraciones judías concentradas en septiembre.

En vista de una reunión del gabinete de Covid, el ministerio de Salud pidió la imposición de una semana de cuarentena en casa para los que lleguen de una lista actualizada de 42 países, anticipó la radio pública Kan.

La medida, especificó, también afectaría a los vacunados y a los que se recuperaron del coronavirus.

En las últimas semanas las autoridades ya endurecieron las restricciones para quienes regresan desde el exterior y han expandido los países a los que está prohibido viajar al considerarse de máximo riesgo. En esta lista están España, Argentina, México o Brasil, a los que ciudadanos israelíes y residentes en el país no pueden viajar sin obtener un permiso especial.

Ante la creciente propagación de la pandemia, el ministerio de Salud ahora preparó otro paquete de medidas restrictivas que se aprobarán con urgencia para frenar el ritmo de los contagios.

Mientras tanto, sigue siendo generalizada entre los líderes israelíes la sensación de que es de importancia crítica la vacunación masiva entre un millón de israelíes que todavía, por diversas razones, aún no fueron inmunizados.

La variante Delta que estaría detrás de los rebrotes fue detectada en India por primera vez en octubre de 2020 se caracteriza por ser mucho más transmisible que la original y está camino a convertirse en la dominante en el mundo, lo que está obligando a países a revisar el levantamiento de restricciones.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que la variante Delta o B.1.617.2 ya se detectó en al menos 132 países y es considerada como una de las cuatro mutaciones más preocupantes, junto con Alfa que se originó en Reino Unido, Beta (Sudáfrica) y Gamma (Brasil).