Los Golden State Warriors se proclamaron este viernes campeones de la NBA por segunda temporada consecutiva al volver a imponerse en las finales a los Cleveland Cavaliers.

Los de Stephen Curry, que han ganado tres de los últimos cuatro títulos, se impusieron en el partido de esta noche por 108-85.

El jugador más valioso de la final (MVP) fue para el alero Kevin Durant.

La nueva derrota de Cavaliers dejó la serie final en un contundente 4-0. Es la segunda ocasión en que LeBron James se queda a cero en una final después de la de 2007 frente a los San Antonio Spurs, también con Cleveland.