KATMANDÚ. El hielo en un glaciar cercano a la cumbre del monte Everest, que tardó milenios en formarse, se está derritiendo de forma acelerada en las últimas tres décadas debido al cambio climático, según un estudio.

El glaciar del Collado Sur ha perdido cerca de 55 metros de espesor en los últimos 25 años, según una investigación llevada a cabo por la Universidad de Maine y publicada por la revista Nature.

Un registro de carbono 14 ha mostrado que la capa superior del glaciar tiene unos dos mil años, pero ahora está perdiendo espesor 80 veces más rápido que en el momento en que se formó, según el estudio. A este ritmo el glaciar del Collado Sur “probablemente va a desaparecer en algunas décadas”, dijo el científico Paul Mayewski, que dirigió el estudio, al National Geographic.

Este glaciar está a unos siete mil 900 metros de altura, más o menos a un kilómetro por debajo del nivel de la cumbre del Everest, la montaña más alta del mundo ubicada en Nepal.

Según otros investigadores, otros glaciares de la cadena del Himalaya están derritiéndose a un ritmo elevado, provocando la creación de centenares de lagos en las laderas de la cordillera, con el consiguiente riesgo de generar inundaciones.

INFLUENCIA DE LAGOS

Anteriormente, otro estudio informaba que Los glaciares se reducen debido al calentamiento global, pero lo hacen más rápido si desembocan en un lago, según un informe financiado por el Fondo Nacional Suizo (FNS).

Los científicos analizaron en detalle la situación con los glaciares de montaña, indica en un comunicado el FNS, principal institución suiza de fomento de la investigación científica.

El estudio abarcó 319 glaciares en el Himalaya y cuya superficie superaba los tres kilómetros cuadrados, una quinta parte de los cuales forman lagos.

Los glaciares de esta región alimentan grandes ríos como el Ganges y el Brahmaputra y contribuyen al abastecimiento de agua de 500 millones de personas.

Imágenes infrarrojas satelitales tomadas entre 2017 y 2019 revelaron que los glaciares que terminan en un lago se movieron a una velocidad media de 20 metros al año, es decir, el doble de rápido que los otros.

Cuando los glaciares fluyen más rápido, las reservas de agua acumuladas en forma de hielo se agotan más rápidamente, según el informe.