Todo era perfecto hasta que sucedió esto. Un padre de 30 años de Idaho en Estados Unidos, sufrió hace un par de días un terrible accidente debido al sobrecalentamiento de las baterías de su cigarrillo electrónico de vapor.
Un día como cualquier otro, Andrew Hall explica que el aparato explotó sin razón alguna mientras lo estaba utilizando en el baño, por lo que pudo sentir cómo se rompió en mil pedazos al interior de su boca, impactando contra sus dientes y quemando parte de su rostro y cuello.
Las crudas imágenes del accidente quedaron registrada en el teléfono de Andrew, quien tras ser llevado de forma urgente a un recinto hospitalario expresó lo ocurrido a través de su página de Facebook para crear consciencia sobre este tipo de aparatos y para que quienes lo utilizan lo reconsidere. “Llevo usándolo por más de un año y puedo asegurarles que todo estaba bien (batería correcta y cada elemento en su lugar) pero explotó en mi cara”
